Así son Els Jóvens, grupo revelación valenciano del año

Els Jóvens son el fenómeno musical valenciano de 2018. Arrasaron en los Premis Ovidi en València, donde se llevaron cuatro de los cinco premios a los que aspiraban (entre ellos, mejor intérprete revelación, mejor canción y mejor letra); y repitieron la gesta en los primeros Premis Carles Santos en Castellón, donde recogieron tres galardones (artista revelación, mejor canción y mejor disco).

Lo más sorprendente de todo es que han triunfado con una música diferente, moderna a la par que tradicional, una mezcla que ellos definen como “rondalla pop”. Pero no es de extrañar ya que son, como canta la rapera Tesa, unos de los rebesnietos del Tio Canya: toda su vida han bebido de los míticos Al Tall, de quienes se consideran “fanáticos totales”.

Nacido en Sant Vicent del Raspeig, municipio de l’Alacantí, el grupo Els Jóvens ha arrancado con fuerza de la mano de René Macone y Pep Mirambell (vocalistas, y este último también guitarra) y se ha ido completando en el estudio (sí, ¡en las grabaciones!) con Raül Calatayud (guitarró), Tóbal Rentero (bandurria, laúd, dolçaina y oud), Jordi Sanz (bandurria, laúd y trompeta), Pablo Rosell (percusión), Antonio Lozano (percursión) y Blai Antonio (bajo y coros).

Han tocado ya en varios municipios, entre ellos, en el Barnasants 2018. Es la única incursión que han hecho en Catalunya, pero avanzan que ya tienen previstas más paradas en el norte en los próximos meses.

Ensayan cuando pueden, ya que René vive en Madrid y Pep en Barcelona. Pero las grandes ciudades no les eclipsan y les encanta volver a su tierra, a su poble, a sus raíces. Hablamos con René Macone por teléfono.

-¿Cómo nace el proyeto de Els Jóvens y cómo se ha construido?

Primero hacíamos las canciones entre Pep y yo, para que él las tocara y cantara con la guitarra. Por nuestros gustos e intereses, tenían una clara inspiración en la música tradicional y en elementos de la cultura valenciana y de los pueblos de nuestra comarca, l’Alacantí. La segunda parte del proceso fue grabarlas con el productor, Blai Antonio Vañó, de Bocairent, que ya conocíamos. El grupo se fue formando conforme grabábamos el disco con músicos que íbamos conociendo. Un día Pep me dijo qué canciones teníamos que cantar cada uno; ahora parece que estuvo muy bien pensado, pero se hizo sobre la marcha.

-¿Se improvisó la grabación del disco?

Fue muy improvisado, pero no recomendamos el método porque se hizo muy largo. Sin grupo, sin saber muy bien cómo lo quieres hacer realmente... provoca que cambies muchas cosas y cambies de idea por el camino. El proceso de grabar el disco duró dos años, pero hemos tenido mucha suerte porque a los nuevos miembros del grupo les gustó la idea y tenemos muy buena relación. En el grupo de WhatsApp estamos todo el día hablando, nos hemos hecho muy colegas.

Somos unos fanáticos de la tradición, pero la hemos escuchado en Youtube y en Spotify”

-¿Cómo definiríais vuestro estilo musical? Suena tradicional, pero con letra moderna.

Siempre nos dicen que somos una rondalla moderna, una rondalla pop. Creo que es una buena definición, pero en el momento que no estábamos haciendo no lo pensamos. Queríamos hacer un grupo de música con estos elementos. En la exposición del grupo en los conciertos sí que parecemos una rondalla moderna, pero ha sido como todo, accidental.

-Imagino que con el éxito que estáis teniendo, ya os habréis planteado vuestro futuro y la continuidad de Els Jóvens.

Yo creo que después de todo lo que ha pasado y lo que nos dice la gente, el proyecto debe continuar. Seguramente “Els Jóvens 2” o como se diga, pasará, aunque no inminentemente. Nosotros seguimos haciendo canciones porque siempre las estamos haciendo, no paramos nunca. Con la repercusión del disco sentimos un poco de vértigo, tenemos la presión de hacer un segundo disco que esté a la altura del primero después de la acogida tan maravillosa. Pero bueno, nosotros no somos mucho de pensar las cosas.

-Es posible que seáis el grupo de l’Alacantí de hace música en valenciano más premiado de la historia, y en vuestro año de debut. Además, lo habéis logrado con música tradicional valenciana, en una parte del territorio donde no es lo más habitual.

Es complicado escuchar esta música y encontrar referentes en nuestra comarca. Somos unos fanáticos de la tradición, pero la hemos escuchado en Youtube y en Spotify, realmente para nosotros ha sido una cosa exótica. Y creo que eso está guay, porque hace que genere más interés. A veces, lo que tienes muy a mano te interesa menos.

-¿Por qué Els Jóvens?

¡No lo pensamos demasiado! Se lo dije un día a Pep y le pareció bien. Las mayoría de las canciones que teníamos eran de antes de tener un nombre y hablaban de cuando éramos jóvenes.

-¡Suena a eso de “los treinta son los nuevos veinte”!

[Ríe] Nos pasa mucho que vamos a pueblos y nos dicen: “¡Pues tampoco sois tan jóvenes!”. Es una cuestión más artística que realista.

Es más importante para el valenciano entrarle a la gente de una manera divertida, que esté más en lo lúdico que no en lo obligatorio”

-Vuestra revolución es doble: aprovechar elementos de la música tradicional y cantar en valenciano en una comarca tan castellanoparlante como l’Alacantí. ¿Cómo véis el tema lingüístico? ¿Creéis que está recuperándose o es una batalla perdida en el sur?

La situación del valenciano en nuestra comarca es complicada y está, probablemente, yendo más hacia abajo que hacia arriba. Yo no he visto una recuperación seria. Pero Els Jóvens han tenido muy buena acogida y he visto a mucha gente de l’Alacantí interesada, que seguramente ya escuchaban otras manifestaciones de la cultura valenciana. Pienso que es fundamental que el valenciano no sea solo una asignatura en la escuela, si también es el idioma de los grupos que me gustan es más importante que hacer una campaña por la lengua. Es más importante para el valenciano entrarle a la gente de una manera divertida, que esté más en lo lúdico que no en lo obligatorio.

-Hacéis referencias muy concretos a espacios de vuestra tierra, como es El Baresito de Sant Vicent del Raspeig. ¿Aprovecháis para reivindicar vuestras raíces?

Son cosas que queríamos introducir obligatoriamente porque hay muchas canciones que hablan de costumbres y cosas de otros lugares, y pensamos que de Sant Vicent o de Mutxamel se ha hablado muy poco. Son pueblos medio olvidados, vive mucha gente en ellos pero realmente tienen muy poca presencia. Estamos orgullosos de que ahora se hable y se conozca un poco mejor nuestra zona, que a mí me gusta mucho. Vivo en Madrid pero me encanta volver a allí. Es la millor terreta del món de verdad.

A los catalanes les gusta la música folklórica, pero no solo la suya”

-Els Jóvens nace en un momento política y socialmente muy diferente al de otros grupos como Obrint Pas o Aspecant. A pesar de ello, no dejáis de lado la crítica en algunas canciones.

Que haya gente que cante en valenciano sin hacer música reivindicativa me parece bien para hacer más amplio el catálogo. Pero nosotros sí queríamos usar la música para decir cosas que nos importan en cualquier categoría, entre ello, hay mensajes que no sé si son políticos. No creo que se puedan clasificar en una ideología concreta porque no hay ninguna que nos represente al 100%. Pero sí hay política y reivindicación. A mí siempre me han gustado los músicos que tienen opinión y que se meten en líos.

-Hubo una época en la que Catalunya era casi la única salida para los músicos valencianos. Vosotros ya habéis tocado en el Barnasants. ¿Cómo fue la respuesta?

Pienso que a los catalanes les gusta la música folklórica, pero no solo la suya. A mí me pasa lo mismo, me gusta la gallega, la brasileña... En Catalunya creo que la música folklórica tiene un circuito más desarrollado que en el resto de territorios. Tienen más costumbre que otros.

-¿Eso no pasa en el País Valencià?

De Pep Gimeno ‘Botifarra’ a la siguiente propuesta hay mucha distancia. Tenemos que trabajar un poco en ese sentido. Creo que hay poco acceso, pero realmente cuando la gente lo escucha le gusta. La música popular es popular por algún motivo y normalmente siempre conecta.