La sombra de Juan Cotino en el PP valenciano
Análisis
Retirado de la vida pública, el exconseller sigue siendo, para algunos, una persona con gran influencia en el PP valenciano. Pero su entorno afirma que está muy alejado de la política
No hay un consenso claro. Para unos, sigue siendo una persona muy influyente, especialmente sobre el presidente de la Diputación de Alicante, César Sánchez; y con una estrecha relación con el presidente de la gestora del PP provincial de València, Juan Ramón Adsuara. “Pero ya no le influye tanto como antes”, apuntan. Pero para su entorno, su capacidad de maniobra en la fontanería del partido, antaño enorme, casi hegemónica, especialmente durante la presidencia de Francisco Camps, es ahora inexistente: “Sólo se dedica a sus campos, está alejado totalmente de la política”. Un dato: Juan Cotino se dio de baja en el PP en el año 2014.
En cualquier caso, citar a Juan Cotino a según qué dirigentes del PP autonómico, provincial e incluso local en València, despierta no pocos comentarios, y también algunas inquietudes; su perfil sigue provocando un gran respeto y se podría decir que algunos incluso le temen. El que fuera conseller y president de las Cortes Valencianas, pieza clave del sector cristiano del PP valenciano, imputado en una pieza separada de Gürtel - la de la visita del Papa Benedito XVI - vive retirado de la vida pública, no va a actos de ningún tipo, menos aún del PP, excepto a encuentros privados con amigos, especialmente en su pueblo; pero su sombra, para sus antiguos compañeros, sigue viva, según varios testimonios.
”Cuando ganó Pablo Casado supimos que el nuevo relato iba a beneficiar a César Sánchez y a personas como Juan Cotino”. Lo afirma una persona del entorno de la presidenta del PP, Isabel Bonig. Estas fuentes subrayan que Juan Cotino deseaba no tanto la victoria de Pablo Casado sino la de María Dolores de Cospedal. “En Alicante muchos están convencidos de que el presidente de la Diputación apoyó a Cospedal por petición de Juan Cotino, le hizo ese favor, aunque su deseo era votar directamente a Casado”.
Sea o no cierto, en los diferentes estamentos del PP valenciano se coincide en destacar que Juan Cotino tiene una fuerte ascendencia sobre César Sánchez; un político que para muchos aspira a relavar a Isabel Bonig al frente del PP valenciano si esta no obtiene un buen resultado en las elecciones autonómicas del 2019, hipótesis muy comentada en el entorno de la presidenta del PP autonómico.
César Sánchez, que ha hecho del “cantonalismo” su principal estrategia para erosionar el Consell de Ximo Puig , es uno de los miembros del claustro de profesores de la Fundació Vives, Think Tank creado hace unos años por el sector cristiano del PP, con Juan Cotino y Miguel Dominguez como abanderados. Un foro de formación y debate que Francisco Camps apoyó durante su presidencia y al que Cotino sigue dedicando tiempo.
En ese claustro, según se anuncia en la página web de la fundación, se encuentran también como profesores Isabel Bonig, José Ramón Adsuara y la diputada autonómica María José Catalá, al que no son pocos los que la ven como una clara candidata a la alcaldía de València si la operación para ubicar a Esteban González Pons fracasa.
Que César Sánchez, Adsuara y Català, tres niveles del PP valenciano, sean profesores de la Fundació Vives “fue un elemento clave para los tres en el pasado, pero ahora Adsuara comienza a tener relato propio y María José hace tiempo que vuela por su cuenta”, afirman desde la estructura provincial. Según esta versión, en la que coinciden otros dirigentes del PP autonómico, Juan Cotino mantendría una buena relación con Adusara, pero este sería ya un hombre leal a Isabel Bonig, que presionó para que el alcalde de Alfafar alcanzara la presidencia de la gestora provincial en lugar de Vicente Betoret. En el caso de María José Catalá, todas las fuentes, en todos los niveles, señalan que la diputada autonómica ya no mantiene una relación estrecha con el exconseller: “antes sí fueron personas que colaboraban mucho, ahora ya no; ella se está creando un perfil propio y fuerte, está ampliando complicidades para ser la candidata, incluso con Isabel Bonig de apoyo”.
Es el entorno de la presidenta del PP valenciano el que traslada más inquietudes respecto al papel de Juan Cotino. Temen, realmente, que una hipotética asociación entre Juan Cotino y César Sánchez tras las elecciones del 2019 acabe por condicionar el futuro del partido en la Comunidad Valenciana. Es decir, una alianza entre el PP de Alicante y el sector cristiano del PP de València. Pero lo cierto es que el exconseller ya no hace vida de partido ni se implica en estas guerras internas.
En la historia reciente se recuerda cómo Cotino, con el apoyo del sector cristiano, fue fundamental para que Francisco Camps ganara la batalla orgánica contra Eduardo Zaplana; pero fue un tiempo en el que el expresident de las Cortes Valencianas vivía entregado a la vida de partido. Se valora, además, que el giro dado por el PP español con la victoria de Pablo Casado, beneficia a las posiciones más conservadoras del partido, que son las que benefician a César Sánchez.
Tampoco son pocos los que afirman que Juan Cotino está influyendo la elección del candidato a la alcaldía de València. Aunque no mantiene una estrecha relación con María José Catalá, sí se apunta que no desea que el cabeza de lista para las locales sea Luís Santamaría. En cualquier caso, Juan Cotino se mantiene discreto y elude la vida pública: “pero le encanta la política, aunque sea a distancia; y no son pocos en la estructura del PP valenciano que aún le consultan muchas cosas”, señala una fuente local.