Sin trenes entre Tarragona y Sant Vicenç de Calders durante cinco meses por el mayor corte ferroviario de la historia en Catalunya, la fecha del 3 de marzo estaba marcada en verde para 15.000 pasajeros que han visto trastocado su día a día desde el pasado 1 de octubre. Hoy volverán a circular los trenes regionales entre las comarcas de Tarragona y las Terres de l’Ebre y la capital catalana. Alivio, sí, pero incompleto.
El macrocorte acaba, pero parte de los problemas en los trenes seguirán al menos hasta el 25 de mayo y la normalidad plena no se recuperará hasta septiembre.
Si los viajes de prueba van bien esta mañana, los trenes volverán entre Tarragona y Barcelona por la tarde
Las obras en la estación de Sant Vicenç de Calders van con retraso y los trabajos obligarán a dejar sin parada en esta estación a todos los trenes regionales con origen o destino en las comarcas de Tarragona. Por si esto fuera poco, la circulación en el tramo de entrada y salida de los regionales en la estación de Sant Vicenç se ha reducido a una vía única por las mismas obras. Cualquier incidencia o desajuste tendrá consecuencias nefastas en el cumplimiento de los horarios y los tiempos de recorrido, por no hablar de lo que puede suceder en caso de que un tren de pasajeros o mercancías se averíe y cierre el paso temporalmente por este vía única.
A la incertidumbre ligada al fin del supercorte, con viajes de prueba durante toda la mañana de hoy para confirmar que las vías son seguras y todo funciona bien, hay que añadir las consecuencias del caos ferroviario vivido durante el fin de semana por el cierre total de la estación de Sant Vicenç por las obras. Una traca final ya anunciada, pero de peores consecuencias de las previstas.
El conflicto laboral suma incertidumbre
El conflicto laboral abierto por los sindicatos de Renfe por su rechazo al traspaso de Rodalies a la Generalitat podría afectar negativamente hoy lunes a la recuperación de los trenes regionales entre Tarragona y Barcelona. La situación en muchos momentos caótica en la R2 y la R4 del fin de semana, derivada en parte del mismo conflicto laboral según Renfe, no invita al optimismo. Más ansiedad para los pasajeros que esta tarde dudan de si volver a confiar en un regional para regresar de su trabajo desde Barcelona a las comarcas de Tarragona. La gran prueba de fuego, no obstante, llegará mañana martes, cuando el servicio de regionales empezará a funcionar desde primera hora de la mañana. La Plataforma Dignitat a les Vies, surgida entre los usuarios para exigir soluciones, destaca sus dudas y enorme preocupación.
Entre los maltratados usuarios de la red de regionales del sur de Catalunya, ha crecido en las últimas horas la ansiedad por la esperada recuperación del servicio. No ha ayudado a tranquilizar a los pasajeros, sino todo lo contrario, lo vivido el sábado de carnaval en la línea R2 sur, con muchos retrasos y miles de usuarios esperando en los andenes para subir a trenes abarrotados. El sistema de transporte alternativo en bus hasta Cunit tampoco funcionó como debía.
“Ya avisamos que la estación de Cunit no era la idónea para hacer de Sant Vicenç, es una estación pequeña y con barreras”, advierte Ana Gómez, portavoz de la Plataforma Dignitat a les Vies, después del caos del sábado.
Ya avisamos que la estación de Cunit no era la idónea para hacer de Sant Vicenç, es una estación pequeña y con barreras
Aunque lo de este fin de semana ha sido excepcional, la estación de Cunit (Baix Penedès) se convierte en un nudo de comunicaciones para parte de los usuarios de los trenes regionales mientras duren las obras en Sant Vicenç. Deberá asumir parte del volumen de pasajeros que necesitan coger un cercanías porque su destino final no es Barcelona.
El final incompleto del macrocorte ha obligado a Renfe a mantener parte del plan de transporte alternativo de los últimos cinco meses, con autobuses que conectarán por ejemplo Torredembarra (Tarragonès) con Sant Vicenç. Los buses directos a Barcelona desde Tarragona o Reus seguirán siendo de buen seguro un refugio para los pasajeros que prefieran esperar a ver cómo es la vuelta a la seminormalidad ferroviaria.
Las obras de Adif en el túnel de Roda se han hecho para permitir el paso de trenes de mercancías más grandes de la línea del corredor mediterráneo. El Ministerio de Transportes ha aprovechado para instalar el tercer hilo, la solución provisional para trenes de carga de ancho internacional.
El agravio ferroviario en el sur de Catalunya, tras décadas de desinversión, no acaba hoy a pesar de que –alegría contenida– los trenes regionales entre Tarragona y Barcelona (R14, R15, R16 y R17) volverán a circular a las 14.55 h. Entre las dos capitales el compromiso de Renfe es el de mantener un servicio fiable –crucen los dedos– con trenes cada media hora en los dos sentidos. Aleluya.