El Ayuntamiento de Reus ha iniciado esta semana una campaña para combatir la acumulación de basura fuera de los contenedores y el mal uso de las papeleras en algunas zonas del municipio.
Unos comportamientos incívicos que el consistorio pretende poner fin con medidas “de urgencia”. “Este pasotismo va más allá del incivismo, no dejaremos pasar ni una”, ha manifestado el alcalde Carles Pellicer.
Durante estos días, seis inspectores de paisano y varios educadores ambientales han empezado a vigilar por las calles. Además, está previsto que se hagan fotografías y, si fuera necesario, se abran bolsas de basura para identificar a los infractores, que pueden ser sancionados con multas de hasta 600 euros.
Pondremos sanciones y seremos contundentes”
El equipo de inspectores, que trabajan conjuntamente con la Guardia Urbana, elabora informes de malas prácticas y de los puntos más conflictivos, mientras que los educadores ambientales se dedican a relacionarse con la ciudadanía desde una vertiente pedagógica.
Asimismo, se realizarán acciones de concienciación en comercios de la ciudad y se han colocado adhesivo en todos los contenedores con el lema de la campaña, “La brossa, dins!”. El alcalde Pellicer ha lamentado que Reus haya adquirido una “mala imagen” y ha asegurado que él mismo ha llamado la atención a vecinos que dejaban la basura en la calle.
“Pondremos sanciones y seremos contundentes”, ha afirmado Pellicer, que ha convertido la problemática en una prioridad y ha aseverado que el pasado fin de semana se abrieron hasta 54 actas por actitudes incívicas en el municipio, sobre todo por orinar en la calle.