La desunión de la izquierda coloca a Carmena como candidata única
Madrid
Podemos mastica el último desaire de la alcaldesa y opta por retirarse de la carrera por la Alcaldía
Podemos, de momento, rechazaría rivalizar con Carmena en las municipales.
Manuela Carmena es, en el momento en el que se escriben estas líneas, la candidata oficial de la izquierda en Madrid . Como eslogan es impecable. Incluso suena a reconciliación entre las partes implicadas. Sin embargo la letra pequeña indica que la forma en la que Carmena ha llegado a esta situación es, precisamente todo lo contrario. Es la desunión total entre fuerzas lo que ha derivado en que Podemos, IU y Ahora Madrid no vayan a rivalizar en candidaturas. Un hecho sin precedentes que solamente se explica por el tirón y peso político de la exjueza y actual alcaldesa de la capital.
En realidad Carmena siempre ha ido por libre ajena a los pasteleos de la política, y así lo ha repetido en varias ocasiones desde el inicio de la legislatura. La penúltima tras el desmarque de cinco de sus ediles de Podemos ante las imposiciones dictadas por su secretario general a la hora de repartir los puestas de la lista electoral y rechazando someterse a las primarias del partido para integrarse directamente en Más Madrid, la plataforma de la regidora.
“Con Iglesias no he hablado. No tengo una vinculación específica con él ni necesidad de tener con él una conversación. Creo que es un problema que surge en el marco de Podemos y no tengo nada que ver. Yo no soy del partido Podemos ni tengo ninguna vinculación política directa con el partido. En el Gobierno de Madrid hay unos ediles muy buenos y valiosos y son ellos los que decidirán cómo resolverlo”, señalaba entonces.
Es precisamente esa independencia la que aupó a la exjueza hasta la Alcaldía en 2015 liderando una candidatura ciudadana que, pese a contar con ADN Podemos, nunca presumió de él en campaña. De ahí que Camena no se sienta atada a ningunas siglas cuando es preguntada por la formación morada. Es así como esta misma mañana no ha titubeado un solo segundo al rechazar que Julio Rodríguez, ex Jemad, y el hombre fuerte de Pablo Iglesias para el Ayuntamiento, esté en su equipo.
“No, no he pensado en él. A lo mejor si él estuviera interesado en el área de Policía, pues a lo mejor sí. Pero en principio no he pensado en él como que pudiera ser una persona excelente”, ha argumentado en una entrevista en Onda Cero.
Este último desaire no sentaba bien en Podemos como bien ha expresado su portavoz adjunta de Unidos Podemos en el Congreso, Ione Belarra, quien ha descrito como una “mala noticia” el portazo de Carmena al ex JEMAD enmarcándola como una situación “derivada” del cisma generado en Podemos después de que el confundador Íñigo Errejón anunciara que concurrirá a las elecciones autonómicas como candidato de Más Madrid. “Toca pasar página y centrarse en las tareas. Es una pena, pero el escenario a veces no se elige y este nos lo han dado hecho los que han decidido embarcarse en un proyecto personal”, aseguraba a mediodía la portavoz parlamentaria ‘morada’.
Ya por la tarde, Podemos ha hecho sus cálculos y ha decidido retirarse de la carrera por el Ayuntamiento para la que las encuestas no tienen un claro vencedor siendo Begoña Villacís, Ciudadanos, quien disfrutaría de medio cuerpo de ventaja. Será curioso ver el contorsionismo de Podemos en campaña para pedir a sus votantes que Más Madrid en la capital cuenta con su apoyo mientras Más Madrid en la Comunidad no.
Por tanto habrá más izquierda en Madrid, pero menos Podemos. E Iglesias tendrá que buscar un nuevo acomodo -y van...- a Rodríguez- a quien quiso empotrar bien arriba en la lista de Carmena para recoger el bastón de mando en caso de que la alcaldesa revalidara su cargo pero se retirara a mitad de legislatura. Porque todo son cálculos y proyecciones electorales estos días. Y que Podemos rivalice con Errejón por la Comunidad, pero no con Carmena por el Ayuntamiento es la prueba de que la candidatura única de la izquierda en la capital es más fruto de la desunión que de la unión de la izquierda.