El Ayuntamiento de Sant Adrià de Besòs ha firmado este miércoles un protocolo con Aigües de Barcelona por el que acuerdan que se mantendrá el suministro del servicio de agua corriente en casos de impago por falta de recursos económicos. El objetivo del acuerdo, explican ambas partes, es afrontar la emergencia en el ámbito de la pobreza energética.
El acuerdo entre la empresa y el Ayuntamiento de Sant Adrià establece que antes de suspender el suministro, Aigües de Barcelona solicitará un informe de valoración de la situación de vulnerabilidad del usuario y su unidad familiar. Si este informe constata las dificultades económicas de la familia, la empresa no les cortará el servicio.
Además, Aigües de Barcelona se compromete a formalizar un contrato de suministro de agua a las familias sin derecho de uso sobre la vivienda en la que residen, siempre que el Ayuntamiento así lo solicite. De este modo, Sant Adrià de Besòs pretende garantizar el acceso al servicio a la población más vulnerable, que en muchas ocasiones tiene una situación habitacional irregular.
“Aigües de Barcelona ya hace años que no corta el agua a nadie que no la pueda pagar y además desde 2012 bonifica el servicio a más de 16.000 familias a través de su Fondo de Solidaridad”, ha señalado la compañía este miércoles en un comunicado. Este fondo se gestiona en coordinación con los servicios sociales de los municipios del área metropolitana provistos por Aigües de Barcelona.
Telelectura de los contadores
Durante el acto, Ayuntamiento y empresa también han firmado un convenio para implantar la lectura telemática de los contadores. Con esta nueva lectura mejorará el control de los consumos a la vez se promoverá una cultura de consumo inteligente y más eficiente. “La telelectura minimiza las incidencias por fugas gracias a una detección más fácil, potencia una gestión sostenible y mejora el proceso de facturación”, explica la subministradora. Para ello, el consistorio autorizará a Aigües de Barcelona a utilizar varios espacios municipales para instalar los equipos y operar.
A día de hoy varios municipios ya utilizan esta tecnología de lectura remota, como Sant Climent de Llobregat en todos los contadores del municipio o las poblaciones de Begues, Castelldefels, Sant Feliu de Llobregat, El Papiol y Viladecans que están en proceso de plena implantación.