El exceso de velocidad está cada vez detrás de más accidentes de tráfico en Catalunya. La superación de los límites de velocidad establecidos se consignan como uno de los factores causantes de 1.242 accidentes con víctimas mortales, graves o leves durante el 2024. Es un 28% más que en el año anterior, lo que ha hecho saltar todas las alarmas en el Servei Català de Trànsit.
“Hemos detectado una cierta relajación por parte de los conductores con el tema de la velocidad”, advierte el director de Trànsit, Ramon Lamiel, que destaca como los carroradares recién estrenados en lugares donde los conductores no se los esperaban cazaron hasta un 20% de vehículos superando la velocidad permitida en diversos puntos de la red viaria catalana. En Trànsit están decididos a darle la vuelta a la situación y centrarán gran parte de sus esfuerzos este año en rebajar las velocidades inadecuadas en la carretera. Y la amenaza de ser multados es la fórmula que mejor funciona para convencer a los conductores de que no aprieten el acelerador más de la cuenta.
Al margen de la velocidad, el factor que más ha crecido porcentualmente durante los últimos meses es el mal tiempo, que se ha duplicado como causa de los accidentes, aunque en números absolutos es un número pequeño (121) si se compara con los factores más habituales: infracción de una norma de circulación (2.430 accidentes, un 8% más), distracciones (2.262, un 2,8% más) y errores del conductor (1.430, un 2,5% más), tres clásicos que son los únicos que quedan por delante de la velocidad inadecuada en el listado de factores informados, que pueden ser más de uno. Hay también algo más de un millar de accidentes en los que ha estado implicada la aparición de fauna en la carretera.
La presencia del alcohol y las drogas se ha reducido un 10% en los atestados durante el último año
La velocidad será la cuestión que tomará el relevo como prioridad en las campañas de concienciación y en las acciones de Trànsit, que durante los últimos meses se han centrado en el alcohol y las drogas, otra vieja causa conocida que en el 2024 se ha reducido un 10% tras crecer de manera importante durante el año anterior. Es prácticamente el único factor concurrente sobre el conjunto de accidentes con víctimas que desciende. En números absolutos ha pasado de estar presente en 524 accidentes a hacerlo en 467, aunque aún falta por determinar en qué porcentaje lo ha hecho en los accidentes mortales. En el 2023, el alcohol o las drogas estuvieron presentes en cuatro de cada diez sucesos con muertos.
Lamiel asegura que a partir de ahora se quiere ir más allá de los consabidos controles alrededor de las zonas de ocio nocturno y pasarán a hacerse “pruebas de alcoholemia aleatorias en cualquier punto de la red viaria”. El cambio de proceder se enmarca en un proyecto junto a los Mossos y la Universitat de Barcelona (UB) para tratar de detectar tendencias y patrones de consumo de alcohol y drogas. Va en la línea de la apuesta por el trabajo junto a la academia que Trànsit está impulsando para sacar provecho de tecnologías como la inteligencia artificial para anticiparse a posibles accidentes y congestiones mediante sistemas predictivos.
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