El tan reivindicado plan de choque contra la multirreincidencia se ha materializado este miércoles con un anuncio de calado: el Gobierno y la Generalitat crearán en Barcelona cuatro nuevos juzgados de lo penal y un tercer juzgado de delitos leves (antiguas faltas) para combatir el fenómeno. Con este pacto se acaba con el déficit de juzgados de Barcelona donde hay más delitos que en Madrid, pero que en cambio cuenta con 6 juzgados penales menos. En el año 2023, se señalaron en la capital catalana más del doble de juicios rápidos que en Madrid teniendo 6 juzgados penales menos y casi 3 veces más que en Sevilla y 6 veces más que en Valencia. Con la aplicación de este plan, Barcelona contará con 33 juzgados penales (25 de lo penal fijos, 4 de refuerzo que ya había a los que suman 4 más de refuerzo) mientras que Madrid cuenta con 31.
La medida ha sido anunciada en una rueda de prensa conjunta entre el ministro de Justicia, Félix Bolaños, el conseller de Justicia, Ramon Espadaler y el alcalde de Barcelona, Jaume Collboni para exhibir el compromiso de las tres administraciones con la seguridad. El ministro ha departido antes de la rueda de prensa con el president de la Generalitat, Salvador Illa. Las tres administraciones son conscientes de que la incapacidad de la justicia por solventar con rapidez los hurtos “genera percepción de inseguridad”. “La seguridad ciudadana es fundamental para garantizar la convivencia, la calidad de vida y el estado del bienestar. Una vez detectado un problema grave, los gobiernos nos ponemos manos a la obra para solucionarlo. Lo público es lo que garantiza la calidad de vida de los ciudadanos”, ha explicado el ministro de Justicia, Félix Bolaños. Los tres gobiernos admiten que existe “un problema grave” y han puesto un dato sobre la mesa: 487 personas estuvieron implicadas en 6.169 delitos durante el último año.
La situación era especialmente grave en los juicios rápidos- encargados de juzgar a los multirreincidentes y que tardan un año y medio en sentar al acusado en el banquillo desde que se produce el hecho. El Gobierno y el Govern auguran que la puesta en marcha de los cuatro juzgados de lo penal permitirá reducir a un mes el plazo de enjuiciamiento a mediados de 2026. En el caso de los juicios leves inmediatos (las antiguas faltas) que acumulan un retraso de ocho meses, ministerio y conselleria calculan que podrán volver a enjuiciar estos delitos en el plazo de un mes a finales de 2026. "Este plan nos permitirá en un plazo razonable situarnos ne la media española en cuanto al cumplimiento de los señalamientos. Ahora los señalamientos que tenían que hacer en quince días se hacen en 15 meses“, ha explicado el conseller de Justíca, Ramon Espadaler.
Justicia calcula que los plazos de enjuiciamiento se reducirán a finales de 2026
Especialmente satisfecho con el acuerdo se ha mostrado el alcalde de Barcelona, Jaume Collboni, que abanderado en el último año la lucha contra la multirreincidencia reclamando medidas más duras para el pequeño delincuente después de que la inseguridad se catapultara como la principal preocupación de los barceloneses. “He sido especialmente pesado e incisivo“, ha recordado Collboni que quiere acabar con la percepción de que ”los delincuentes entran por una puerta y salen por otra”. El alcalde dirigiéndose al ministro ha recordado que durante el mes de junio pidió cita con Bolaños solo para decirle que ”aprobara este tema con urgencia“. ”Queremos que muchos de estos 300 delincuentes en vez de estar en la calle estén en la cárcel", ha reclamado con rotundidad, Collboni.
“Queremos que muchos de estos 300 delincuentes en vez de estar en la calle estén en la cárcel”, ha afirmado Collboni
Una de las discrepancias que existía entre Gobierno y Generalitat para abordar el fenómeno era si hacía falta reformar de nuevo el Código Penal - ya se hizo en 2022- para agilizar los plazos de enjuiciamiento. El Govern y el Ayuntamiento, en sintonía con el diagnóstico que hacía el Col·legi de l’Advocacia de Barcelona, mantenían que era necesaria reformar la legislación para eliminar el obstáculo que imponía la ley de que para aplicar el agravante de multirreincidencia debía tenerse en cuenta que en las anteriores condenas el valor de lo robado superase los 400 euros, El Gobierno sostenía, por contra, que no era necesario modificar el Código Penal e indicaba que mediante un aplicativo informático se podía ir añadiendo esta información para que los jueces supieran de inmediato si debían aplicar el agravante sin necesidad de revisar las anteriores sentencias. Al final, todas las administraciones han secundado la vía del aplicativo como la mejor medida para descongestionar los plazos de enjuiciamiento.
La Guardia Urbana tendrá acceso a la base de datos para consultar si un detenido es multirreincidente
La Guardia Urbana de Barcelona tendrá acceso a la base de datos para consultar si un detenido es multirreincidente y derivarlo al juzgado correspondiente. Hasta ahora, la policía barcelonesa cuando practicaba una detención lo citaba para un juicio de delitos leves inmediatos (antiguas faltas). Se daba la circunstancia de que el detenido una vez se presentaba al juzgado, ocho meses después, el juzgado detectaba que era una multirreincidente y entonces lo derivaba al juzgado de lo penal, lo que dilataba todo el proceso. De esta manera, la consulta previa de la Guardia Urbana, “permitirá ahorrar meses en la tramitación de los juicios rápidos”, ha afirmado Bolaños.