La policía desmantela una fiesta ilegal en Eivissa con más de 100 personas
Covid-19
Los asistentes no llevaban mascarilla ni respetaban las distancias de seguridad
Cala de Sant Vicenç en Eivissa
La Policía Local de Sant Josep, en Eivissa, ha desmantelado una fiesta ilegal con más de 100 personas que se celebraba en un club también ilegal, en la que los asistentes no llevaban mascarilla ni respetaban la distancia de seguridad. La Guardia Civil tuvo conocimiento de la fiesta y pidió ayuda de la Policía Local y a las 04.00 de la madrugada del lunes comenzó el control de los accesos a la fiesta .
Finalmente pudieron acceder al recinto hasta las 07.45 de la mañana y en el interior comprobaron que se celebraba una fiesta en una de las tres viviendas que comprende la finca, donde permanecían un centenar de personas con música a un volumen muy alto, una barra no permitida y todo el recinto sin las condiciones sanitarias requeridas como consecuencia de la Covid-19.
Sanciones
Los organizadores s se enfrentan a multas de hasta 600.000 euros
La llegada de la policía provocó una desbandada, pero los agentes comprobaron que la fiesta seguía en la zona de la piscina, donde bailaban más asistentes. Todos los servicios de música fueron precintados y se identifico a 58 personas que ahora se exponen a una sanción muy grave penada con entre 3.000 y 60.001 euros, según el decreto que precisamente hoy ha validado el Parlament balear.
Los organizadores de la fiesta se exponen a una multa de hasta 600.000 euros ya que la policía considera que se trata de una falta muy grave. También se enfrentan a otra sanción de hasta 400.000 euros por incumplir la Ley de Turismo ya que la finca no tiene permisos para ofrecer alquiler turístico y los agentes han constatado que existe un contrato de arrendamiento por 15 días por un precio total de 115.000 euros. Los agentes también han firmado una propuesta de sanción de otros 12.000 euros por vulneración de la ordenanza municipal
Se da además la circunstancia de que las tres viviendas construidas en la finca, con el nombre de Casa Lola, Casa Paola y Casa Lolita están pendientes de derribo ya que se construyeron sin ningún tipo de licencia.