‘Todos nosotros’
Con virtuosa pluma, Javier Menéndez honra la belleza de los músicos y artistas de los que escribe, subrayados por su refinado talento literario. Sus libros sobre Sabina, Perdonen la tristeza (Cúpula), Sabina en carne viva, No amanece jamás, son obras de arte, como sus libros sobre Bosé, Dani Martin, Extremoduro... La sensibilidad de Menéndez penetra los arcanos de esos artistas, que saben que nadie les entenderá mejor y se entregan. Y Javier es periodista superlativo porque se siente escritor, le encaja la máxima de Umbral: “El que escribe bien siempre tiene razón”. (Sí: lo que digas es pasajero, cómo lo digas será eterno). Lucrecia le distingue con un premio Alegría de Vivir (Luz de Gas, el miércoles 19 marzo). Su última novela, Todos nosotros (Planeta), es premio Cartagena Negra y Pop Eye.
Joaquín Sabina.
¡Nadie ha escrito sobre Sabina tanto como yo!
“He pasado de la raya a la línea”, me dijo Sabina aquí.
Cada conversación con Joaquín Sabina es un filón de titulares, de “ sabinadas”.
¿Poeta?
Iba para profesor de literatura y la vida le llevó a cantar y ser ídolo de masas... Es escritor, y escribe mejor cada día.
“Ripios”, dirán algunos.
Antes yo desenvainaba para rebatir eso, pero hoy solo digo que los que tienen prejuicios...gozan menos de la vida.
Los tuvo Sabina sobre Julio Iglesias.
“El mejor cantante de orquesta gallega”, se burlaba... Hasta que hablaron. Se admiran. Julio cantó el Y nos dieron las diez , de Sabina. Grandísimos seductores los dos: hablas con cada uno y te enamoran.
Lo sé.
“Lo malo es que en España piensan que soy gilipollas”, me dijo Julio Iglesias, listísimo, riéndose...
Los músicos se le abren a usted, veo.
Quise ser escritor desde niño, mi padre me colaba en el cine, me paseaba por el rastro de libros... Y escribo de música desde que, de jovencito, me conmocionó escuchar a Bob Dylan. Y a Tom Petty, a Cohen, a U2... Son artistas que te emocionan y saben hacerte sentir hermano suyo.
Bob Dylan, ¡Nobel de Literatura!
¡Es justo! Son un gran género literario, las letras de canciones... Las de Sabina son las mejores letras de canciones en español.
¿Y cómo es él?
Único. Un personaje como lo fue en su tiempo Quevedo.
¿Qué destaca de lo último de Sabina?
Escribe mejor que nadie, aunque sus canciones no tengan ya la vieja inmediatez, o la de un Manuel Alejandro o un Perales.
¿José Luis Perales?
Gabriel García Márquez dijo a Sabina que Perales era su favorito: “En tres minutos te cuenta una historia, ¡qué envidia!”.
¿Cuál es el mejor verso de Sabina?
“No dejes que te impidan galopar” (en la canción Esta boca es mía ).
¿Y la mejor canción?
La canción más hermosa del mundo.
¿Y el mejor disco?
Aunque la unanimidad sea para 19 días y 500 noches , yo señalo Yo mi me contigo : ¡ahí veo a todos los Sabinas...!
¿A qué clase de público gusta más Joaquín Sabina?
Peperos y sociatas, latinoamericanos y españoles..., ¡a todas y todos!
¿Son ustedes amigos?
Hemos sido amigos... Y somos amigos, aunque hoy sin frecuentarnos.
¿Y por qué no se frecuentan?
Sabina no puede pisar la calle: son los efectos indeseables de la fama. Ahora se encierra en casa y le vienen escritores.
De la raya... a la línea, ya le digo.
Tras 19 días y 500 noches dejó la cocaína, luego vino el ictus, la “nube negra” (la depresión)...: ¡la adolescencia le duró hasta los cincuenta y pico!
¿Por qué rompieron Sabina y Pancho Varona, su músico de tantos años?
Perdieron la química..., y quizá Varona no gestionó muy bien su ego particular.
Ha biografiado usted, también, a Miguel Bosé.
Fue el iconopop incontestable en español, ¡y el más guapo! Y Bandido , el gran disco pop. No sé qué le ha pasado, no le vi drogarse y hoy es “pitufo gruñón”: ¿quizá un peaje emocional de su salida del armario?
Y ha escrito sobre Dani Martin.
Es un luchador y un currante de gran encanto personal. Y muy maduro: por la muerte de su hermana es puntal de su familia, se ha curado de tonterías, chulerías.
Y de Extremoduro y su líder, Robe.
Ha sido la última revolución del rock transgresor en español, algo de verdad distinto, cóctel de poesía y nitroglicerina.
Y detrás de todos, ¡la presencia de Serrat!
Todos los músicos y cantantes que he conocido, de todos los géneros y estilos, desde la movida hasta el flamenco, mencionan a Serrat como maestro. ¡Es asombroso cómo Serrat ha penetrado en la memoria sentimental de todo el mundo!
Un tótem de nuestra música...
Y altamente lúcido: “Las alfombras rojas que te tienden las discográficas son tan largas como las ventas de tu último disco”, ha sentenciado. Y es así, desde luego.
¿Hacia dónde diría usted que está evolucionando la música en España?
Gana la latinidad y el rock muere. Se imponen el rap, el reguetón... Esa música no me atrae, me resulta demasiado simplona. Pero... respeto a los jóvenes traperos.
¿Por qué?
Son los nuevos contestatarios, son los punk de hoy, los que ahora escandalizan a las abuelas.