“Las buenas relaciones protegen nuestra salud física”
Tengo 72 años. Nací en Nebraska y vivo en Boston. Casado, tengo dos hijos. Ejerzo de psiquiatra, psicoanalista y maestro zen. En EE.UU. hay mucha polarización política en los medios y es muy peligroso. No tenemos un consenso de lo que es verdadero y falso. Creo que todos estamos conectados con todo. (Foto: Mané Espinosa)
Un amigo es un tesoro
Es el cuarto director del mayor estudio de la historia, 85 años por el momento, para analizar las variables que más inciden en la salud y el bienestar mental de las personas. Junto a su colega Marc Schulz ha publicado los resultados en Una buena vida (Planeta): “El ingrediente más importante para la felicidad y la salud son las buenas relaciones interpersonales. La calidad de estas es más importante que la cantidad. Si no les prestamos atención las relaciones se atrofian. A menudo tenemos problemas en las relaciones porque nos volvemos demasiado egocéntricos. La presencia física es insustituible: no existe un sucedáneo de estar juntos. La ciencia dice que los amigos reducen nuestra percepción de las adversidades, hacen que las veamos menos estresantes y cuando experimentamos un estrés extremo reducen su impacto”.
Qué ha entendido sobre el ser humano?
Todos queremos las mismas cosas: la felicidad, la conexión con otras personas, el cariño. Lo que nos divide es ilusión. Y no todo, pero hay sufrimiento que es opcional.
¿Usted cree en la felicidad?
Hace 20 años que heredé el testigo del estudio sobre la felicidad más largo y minucioso de la historia. Grabamos a las parejas y familias en sus casas para estudiar su interacción y los entrevistamos por separado, y puedo darle las condiciones que apoyan la felicidad.
El estudio lleva 85 años en marcha.
Y lo que más me sorprende es el hecho de que las buenas relaciones protegen la salud física: ¿cómo es posible que una buena relación nos proteja contra las enfermedades cardiovasculares o de las articulaciones?
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Al principio no creíamos nuestros propios datos, pero es irrefutable. Las buenas relaciones son reguladores del estrés.
El estrés es parte de la vida.
El problema es cuando es crónico, y estamos seguros de que la soledad es un estresante crónico, el cuerpo mantiene el cortisol alto y la inflamación crónica, situación que daña a muchos sistemas del cuerpo.
Vivimos en el siglo de la soledad.
El estudio dice que una de cada tres personas se siente sola, ¡es una pandemia!, sobre todo en los países desarrollados. En Inglaterra hay un ministro de Soledad porque es un problema social gravísimo.
Y se extiende.
También en India y en China hay mucha preocupación por la destrucción de las estructuras familiares.
Algo no funciona.
El declive de la vida social empezó en los años cincuenta con la introducción del televisor en los hogares. Pero en el 2005 hubo un gran bajón en nuestra actividad social con el uso de las redes sociales.
Estamos en un momento con mucho miedo.
Sí, es algo muy trágico. Cuando yo era niño confiábamos en el gobierno, en los vecinos. Ahora no hay confianza, no hay comunidad, y eso crea intranquilidad.
¿Qué debemos comprender para ser más felices?
Lo importante que es escuchar las voces que nos hacen confiar en el ser humano, y tener claro que cuidar las relaciones sociales nos hace más felices, sin duda.
¿Incluso las superficiales?
Por supuesto, la relación con el camarero que te sirve el café, con quién te vende el pan, el cajero del súper... esas relaciones hacen que nos sintamos parte de una comunidad humana, poner cuidado en mantenerlas es la actitud de la gente más feliz según nuestro estudio.
En las relaciones estrechas es donde más conflicto hay.
Ninguna relación importante existe sin conflictos, pero si podemos resolverlos, y hay métodos, la relación se hace más estable.
El humano es corto de miras y violento.
Sí, pero la mayoría de las personas son amables y compasivas. Hay muchas acciones buenas en el mundo que no vemos. Vemos y leemos las noticias de conflictos y violencia.
Es verdad.
Cuando leo los periódicos baja mi bienestar. He estudiado miles de vidas y la inmensa mayoría son personas buenas y pacíficas, pero a nuestro cerebro le llama la atención la violencia, me da mucha pena.
Cuidarse es otro hito de la felicidad.
La gente que cuida su salud vive entre 10 y 15 años más. Ya sabe: no beber, no fumar, hacer ejercicio regular, son cosas muy importantes para la salud y la longevidad. Y no es mi opinión, son datos científicos.
Para cuidar la salud tienes que tener ilusión.
Si se pierde, la ilusión se recupera, es una crisis del alma. Hay gente en nuestro estudio que no tienen expectativas de encontrar amor o amistad, y lo encuentran. Hay muchas sorpresas en la vida y esto es lo que hemos visto en miles de vidas.
¿La vida guarda sorpresas inesperadas?
Sí. La vida no es lineal. La mía tampoco. Yo no quería ser psiquiatra sino actor y encontré el zen por accidente. Dos pilares de mi vida.
Ahora es usted maestro zen.
He pasado toda mi vida adulta en Harvard, donde se valora mucho la inteligencia, los reconocimientos, publicar. Y he descubierto que eso es un engaño que nos hace sufrir, y que ese sufrimiento es opcional.
¿Algún otro dato significativo?
Nadie tiene vidas perfectas como las vidas editadas de Instagram. El mito de la felicidad perfecta es un engaño.
¿Qué podemos hacer nosotros por nosotros mismos?
Priorizar las relaciones: pueden ser difíciles, complicadas, pero los beneficios son profundos, salvo las relaciones tóxicas.