Polonia ha colocado la seguridad en el centro de su presidencia semestral del Consejo de la UE, abogando por una mayor inversión comunitaria en defensa, y reclama también a los países europeos miembros de la OTAN que eleven el gasto militar en sus respectivos presupuestos nacionales. El ministro de Exteriores, Radoslaw Sikorski, defendió el viernes en Berlín la conveniencia de emitir eurobonos o de crear un banco europeo de la defensa para financiar la seguridad europea ante la amenaza rusa.
“Nuestra prioridad es la seguridad; en Polonia llevamos años preparándonos militarmente, y la agresión de Putin a Ucrania demuestra que teníamos razón”, arguyó Sikorski en un encuentro con corresponsales extranjeros durante la inauguración del nuevo edificio de la embajada polaca en Berlín.
“Esperamos que Alemania finalmente entienda que el dinero para defensa europea tiene que venir de alguna parte, y que la carga debería repartirse de modo equitativo”, dijo el ministro en referencia al posible recurso de emitir deuda conjunta europea para la fabricación y compra de armamento, que el canciller alemán, el socialdemócrata Olaf Scholz, rechaza de plano.
Pulla sobre el regreso de Donald Trump
“Alemania debe de estar encantada de tener de nuevo a un presidente estadounidense con raíces alemanas”, dijo el ministro Sikorski tras inaugurar la nueva embajada polaca en Berlín
Sikorski reivindicó el gasto polaco en defensa del 4,7% de su PIB –muy por encima del 2% que quiere la OTAN y que muchos de sus 32 países miembros no cumplen todavía-, y puso como ejemplo a Lituania, cuyo primer ministro le ha asegurado, según dijo, que este país báltico de 2,8 millones de habitantes planea dedicar a defensa el 5,2% de su PIB. Alemania notificó a la Alianza Atlántica un gasto previsto en defensa del 2% del PIB en el 2024, un porcentaje que alcanza por primera vez desde 1992.
Radoslaw Sikorski –miembro del partido Plataforma Cívica (KO) del primer ministro, Donald Tusk- no ahorró pullas al país que visitaba para inaugurar la nueva embajada polaca, un edificio blanco de líneas rectas con hileras de ventanas en la céntrica avenida Unter den Linden, a poca distancia de la puerta de Brandemburgo.

Radoslaw Sikorski, respondiendo a preguntas de corresponsales extranjeros en la embajada polaca en Berlín
Preguntado por sus expectativas ante la segunda presidencia de Donald Trump en Estados Unidos, Sikorski replicó: “Alemania debe de estar encantada de tener de nuevo a un presidente estadounidense con raíces alemanas”. (El abuelo de Trump era de Kallstadt, un pueblo del oeste de Alemania, y a finales del siglo XIX emigró a Estados Unidos.)
El ministro polaco –que ha recibido reproches en su país por las críticas a Trump de su esposa, la periodista e historiadora polaco-estadounidense Anne Applebaum- fue muy cauteloso sobre el hombre que volverá a residir en la Casa Blanca a partir del 20 de enero. “Históricamente, Polonia ha tenido siempre una gran relación con Estados Unidos, independientemente de quién mandaba en Washington”, recordó Sikorski.
Sikorski incluso habló en tono positivo del actual presidente polaco, Andrzej Duda (procedente del partido ultraconservador PiS), quien tiene muy buena relación con Trump, lo cual “beneficia a Polonia”. Polonia celebra elecciones presidenciales en mayo, a las que Duda no concurre porque lleva ya dos mandatos. “Pero Duda será presidente hasta agosto”, recalcó Sikorski, subrayando los tiempos como una ventaja más.
80.º aniversario de la liberación del campo nazi
Netanyahu no irá a los actos de Auschwitz
El primer ministro de Israel, Beniamin Netanyahu, no acudirá el 27 de enero a los actos conmemorativos del 80.º aniversario de la liberación del campo de exterminio nazi de Auschwitz, según confirmó el ministro de Exteriores polaco, Radoslaw Sikorski. Sobre Netanyahu pesa una orden de arresto de la Corte Penal Internacional (CPI) por presuntos crímenes contra la humanidad y crímenes de guerra en Gaza, y pese a que el Gobierno del primer ministro polaco, Donald Tusk, le dio el 9 de enero garantías de que, de pisar suelo polaco, no sería detenido, Netanyahu ha decidido no ir.