La molécula chavista que cura el virus
Historias del mundo
Maduro asegura que los científicos venezolanos han descubierto el remedio para la Covid-19
Estaban un científico chino, un estadounidense, un ruso, un español y un venezolano buscando la cura del coronavirus. Alto. ¿Un venezolano? Sí, Venezuela tiene el remedio para la Covid-19: la molécula. Anunciada a finales de octubre por el presidente Nicolás Maduro, la molécula DR-10 fue presentada en sociedad mediante un vídeo que ya es objeto de chanza en las redes sociales.
Quien subió la grabación a sus cuentas de internet hace unos días es el gobernador chavista de Carabobo, Rafael Lacava, un peculiar político apodado Drácula al que Maduro atribuyó la autoría intelectual de la molécula.
“Dame la molécula”, dice el mandatario a Lacava, que le entrega una cajita blanca con la bandera venezolana en un lado y la inscripción DR-10 en la tapa. “Esta molécula neutraliza y elimina cien por ciento el coronavirus”, asegura Maduro antes de sacar de la caja un tubito con un líquido amarillento. “Molécula pura”, indica. “Avanzando por el pueblo de Venezuela y por la humanidad, por la salud, contra el coronavirus, a paso científico firme, riguroso, disciplinado; felicito a todos los científicos venezolanos”, agrega.
La molécula DR-10 se extrajo de una planta medicinal que localizó Lacava, un excéntrico gobernador chavista
La molécula ha sido lograda por el Instituto Venezolano de Investigaciones Científicas (IVIC), cuyos investigadores llevan años denunciando las precarias condiciones en que se encuentra la institución, así como la paralización de la mayoría de laboratorios del país. El presidente explicó que se extrajo de una planta medicinal no identificada que localizó Lacava y que la investigación se inició hace seis meses. Maduro también sostuvo que la molécula ha sido aplicada, además de contra la Covid-19, contra la hepatitis C y el virus del papiloma humano, y que se han iniciado los trámites con la OMS para su certificación sanitaria, a pesar de que la comunidad científica no tiene evidencias de su eficacia.
“El principio activo de la molécula fue identificado, es un derivado del ácido ursólico, y esta molécula presenta ciento por ciento de inhibición de la replicación de virus in vitro”, dijo en octubre la ministra de Ciencia y Tecnología, Gabriela Jiménez. “Fue evaluada en células sanas, sin mostrar toxicidad en las dosis en las que fue enfrentada en presencia del virus”, añadió Jiménez.
Al inicio de la pandemia, en marzo, Maduro aseguró que Venezuela ya contaba con un milagroso fármaco, el interferón de fabricación cubana, que curaba el coronavirus. Y poco más tarde, el líder chavista recomendó tomar un brebaje de malojo, saúco, jengibre, pimienta negra, limón y miel para prevenir el virus.
Al inicio de la pandemia, en marzo, Maduro aseguró que Venezuela ya contaba con un milagroso fármaco, el interferón de fabricación cubana, que curaba el coronavirus
El mandatario anunció también que esta será la última semana con confinamiento, después de meses donde las medidas han alternado endurecimiento con flexibilización. “Es un regalo que le doy a Venezuela”, dijo Maduro, felicitándose de haber controlado el virus. Con poco más de 100.000 casos y unos 900 muertos, el país presenta uno de los índices más bajos de impacto de la Covid-19 en América. Algo más de 3.500 contagios y apenas 31 fallecidos por millón de habitantes, cifras cuestionadas por la oposición y organizaciones no gubernamentales en un país opaco que el chavismo controla autoritariamente.
Volviendo a Drácula, el gobernador que descubrió la planta milagrosa, se trata de uno de los chavistas más cercanos a Maduro. Excéntrico y polémico, Lacava ha llegado a añadir su apodo a programas de infraestructuras, como el de transporte, denominado TransDrácula, o incluso inauguró la plaza Transilvania en la ciudad de Naguanagua. Es un apasionado del fútbol. Se postuló para presidir la Federación Venezolana y fundó el club Academia Puerto Cabello.
Acusado de esconder fondos en Andorra y Suiza, sobre Lacava pesan sospechas de corrupción. Su mujer y cuatro hijos se trasladaron a vivir a Barcelona en el 2013 cuando él era alcalde de Puerto Cabello y su primogénito, Matías, fue fichado con 10 años por la Masia del Barça. Lacava había firmado el año anterior un acuerdo con el presidente del Barça, Sandro Rosell, para apoyar la formación futbolística del Academia Puerto Cabello. Debido a la sanción de la FIFA por el fichaje de menores, Matías Lacava dejó el Barça para jugar en las inferiores del Lazio y luego en las del Benfica, que actualmente ostenta su ficha aunque este año regresó cedido al Academia de su tierra.