Macron reúne una minicumbre europea para combatir el yihadismo

Emmanuel Macron organizó ayer una minicumbre europea para dar un nuevo impulso a la lucha contra el terrorismo yihadista. El presidente francés recibió en el Elíseo al canciller austriaco, Sebastian Kurz, con quien almorzó, y luego ambos mantuvieron una videoconferencia en la que participaron la canciller alemana, Angela Merkel; el primer ministro holandés, Mark Rutte; el presidente del Consejo Europeo, Charles Michel, y la presidenta de la Comisión Europea, Ursula von der Leyen.

La iniciativa del encuentro surgió después del reciente atentado islamista en Viena y de las acciones terroristas contra el maestro Samuel Paty, al salir de una escuela cerca de París, y contra la basílica de Notre Dame, en Niza. El objetivo es preparar el terreno para una mayor coordinación a nivel de la UE. Von der Leyen confirmó que la Comisión presentará el próximo 9 de diciembre un nuevo plan de lucha contra el terrorismo.

Cada líder puso énfasis en aspectos diversos

Cada líder puso énfasis en aspectos diversos. Un común denominador fue la voluntad de reforzar el control de las fronteras exteriores del espacio Schengen. Merkel, por ejemplo, insistió en que se ponga en marcha de una vez un registro de entradas y salidas al que todas las policías puedan tener acceso.

Kurz se mostró muy preocupado por la supervisión insuficiente de los yihadistas retornados de Siria e Irak, los llamados foreign fighters . El canciller austriaco propuso encontrar un modo legal de vigilarlos de modo efectivo cuando recuperen la libertad para evitar que reincidan. Según Kurz, algunos sí se han arrepentido de sus actos pero otros “no están curados de la violencia” o son “falsos arrepentidos”, por lo que suponen “bombas de relojería” listas para estallar en cualquier momento.

Macron hizo hincapié en la persecución del discurso del odio en internet y en los mecanismos para que se retiren de la red, de inmediato, los contenidos de apología del terrorismo. Von der Leyen anunció una directiva que endurecerá las sanciones para las plataformas que no sean veloces en suprimir esos contenidos cuando se haya señalado su peligrosidad. La presidenta de la Comisión también adelantó una directiva más restrictiva para la compra de armas en la UE.

Rutte dijo que no hay una guerra entre cristianos y musulmanes, o entre europeos y extranjeros, sino “entre la civilización y la barbarie”.

Charles reiteró su propuesta de crear un instituto europeo que forme a los imanes de las mezquitas, para no depender de predicadores venidos del exterior, una idea que recibió el pleno apoyo de Kurz.