El bisnieto ultraderechista de Mussolini acusa a Facebook de “discriminación” y otras noticias internacionales

Los medios de comunicación de referencia internacional destacan en sus portadas el empate entre Beniamín Netanyahu y su rival Benny Gantz en las elecciones de Israel, pero que a efectos parlamentarios se traduce en una victoria por la mínima del primer ministro con una coalición de partidos de derecha y religiosos. Al margen de esta noticia, repasamos algunos de los titulares más relevantes de este miércoles, 10 de abril, en la prensa extranjera.

The New York Times: la cabecera neoyorquina avanza que el Gobierno de Trump planea presionar para que la política de admisiones de solicitantes de asilo sea mucho más restrictiva. El presidente pretende poner en práctica los cambios con un nuevo equipo administrativo encargado de implementarlos.

The Guardian: el diario londinense publica que varios activistas de extrema derecha, entre ellos, el bisnieto de Benito Mussolini, acusan a Facebook de “discriminación” después de que la plataforma les cerrara su cuenta. Para el descendiente del dictador italiano, que se presenta a las elecciones europeas, la red social le ha bloqueado solo por su apellido.

Le Figaro: el periódico parisino estudia la “intransigencia calculada” de Emmanuel Macron contra el Brexit. Si bien el presidente galo ha adoptado la postura más contraria a las solicitudes de prórroga de Theresa May, también sabe que precipitarse a un divorcio sin acuerdo afirmaría la posición dominante de Alemania en Europa.

Haaretz: el rotativo israelí afirma en una opinión que la victoria de Netanyahu en las elecciones es una demostración que Israel se ha convertido en una dictadura. El artículo habla del descubrimiento de las cámaras ocultas del Likud en zonas de voto mayoritariamente árabe israelí como una forma de disuadir a esta comunidad palestina israelí, cuya participación ha sido muy baja, de ir a votar.

South China Morning Post: el diario hongkonés destaca el engaño que han sufrido los camboyanos pobres que vivían en el bloque de viviendas de bajos ingresos en Phnom Penh, conocido como el Edificio Blanco. Se les echó de casa con la promesa de que restaurarían el edificio para albergarles, pero en cambio, un multimillonario está planeando convertirlo en el tercer casino del país para atraer a los turistas chinos adinerados.