Italia aprueba reducir la financiación pública a los partidos políticos
La nueva ley prevé una reducción del 50%, hasta los 91 millones, de los fondos utilizados para financiar las formaciones
Roma (Efe).- El Senado italiano aprobó hoy de modo definitivo la reforma del sistema de financiación pública de los partidos, que prevé, entre otras medidas, la reducción a la mitad del dinero que percibirán las formaciones y los movimientos políticos.
La norma, que ya fue aprobada por la Cámara de los Diputados (baja), salió adelante con 187 votos a favor, 17 en contra y 22 abstenciones y se convertirá en ley tras su publicación en el Boletín Oficial del Estado.
La nueva ley prevé una reducción del 50 por ciento, hasta los 91 millones de euros, de los fondos utilizados para financiar los partidos. Establece que los recursos ahorrados con esta norma entre 2012 y 2013, que ascenderán a 165 millones de euros, se destinarán a las poblaciones afectadas por los terremotos que han sacudido Italia desde 2009, en las regiones de Los Abruzos y Emilia Romagna.
El 70 por ciento de esos fondos será garantizado directamente por el Estado y se dedicará al reembolso de los gastos electorales, mientras el 30 por ciento restante será en concepto de cofinanciación, por la que los partidos recibirán cincuenta céntimos por cada euro de las contribuciones de personas físicas y entidades.
La financiación pública a las formaciones se reducirá, además, en un 5 % en el caso de los partidos que cuenten con dos tercios de sus candidatos de un mismo sexo, y para obtener la financiación deberán superar la barrera del 2 % de votos en las elecciones a la Cámara de los Diputados o conseguir un escaño.
Asimismo, la ley introduce nuevas medidas para garantizar la transparencia y los controles de los balances de las formaciones, con una comisión formada por cinco magistrados que, junto con sociedades reconocidas por la Comisión Nacional de Valores italiana (Consob), vigilarán las cuentas de los partidos.
En caso de que las formaciones no cumplan con los requisitos establecidos, podrán ser penalizadas por la Comisión con, incluso, la retirada del total de la financiación pública. Los partidos deberán, además, dotarse de una acta de constitución y de un estatuto que acate los principios democráticos en su funcionamiento interno, con especial atención a lo referente a la elección de sus candidatos y el respeto a las minorías.
Durante la tramitación parlamentaria, esta norma fue bautizada como "anti-Grillo", en alusión al cómico Beppe Grillo, líder del "Movimiento 5 estrellas", que encarna la llamada "antipolítica" en Italia y que registró un significativo avance en las elecciones regionales de finales de marzo frente a los partidos tradicionales.
Y es que el "Movimiento 5 Estrellas", que hasta ahora ha rechazado los reembolsos electorales, propone un "no-estatuto" de siete puntos.
Tanto partidos como movimientos políticos reembolsarán los gastos de manutención y del uso de locales utilizados para llevar a cabo su actividad política en función de tarifas definidas por las administraciones locales y no podrán alquilar o comprar inmuebles de personas elegidas en el Parlamento, ya sea europeo o nacional.
En los últimos meses han salido a la luz en Italia numerosos escándalos de corrupción en los partidos, entre ellos el que sacudió a la federalista Liga Norte y que llevó a que su líder histórico, Umberto Bossi, aliado en el último Gobierno de Silvio Berlusconi, dimitiera de su cargo de secretario federal de la formación. Unos escándalos que levantaron fuertes críticas y que, junto al avance de la "antipolítica" y a la difícil situación económica que atraviesa el país, añadieron presión para que se llevaran a cabo reformas en el sistema de financiación.