Violeta Mangriñan está acostumbrada a compartir su día a día en redes sociales. Desde que empezó su trayectoria en el mundo de internet, la valenciana se ha destacado como una de las creadoras de contenido más honestas y transparentes del 'mundo influencer', ya que no solo aborda los aspectos positivos de su rutina, sino que también muestra sin tapujos algunos de sus peores momentos.
Cuando se quedó embarazada y, posteriormente, dio a luz a su primera hija, Gala, parte de su contenido evolucionó. Violeta comenzó a compartir sus preocupaciones como madre, además de pequeños trucos para llegar a todo y gestionar su día a día, sus noches sin dormir, etc.
Con la llegada de Gia, Violeta confesó a su audiencia que estaba llena de miedos y que, en muchas ocasiones, sentía que no podía con todo lo que tenía que hacer. Además, compartió en redes sociales cómo su cuerpo cambió tras dar a luz dos veces en tres años.
Hace unas horas, la amiga de Lola Lolita y Carla Barber abordó el tema corporal en unas historias de Instagram y compartió con los más de 2,4 millones de seguidores que acumula en la red social cómo se siente actualmente con respecto a su físico.
Violeta Mangriñan lanza una reflexión sobre su físico
''Bastante agradecida puedo estarle a mi cuerpo. Habiendo sido mami dos veces, y sin hacer prácticamente deporte desde que di a luz a la segunda, no estoy tan mal. Los brazos bien tonificados porque levanto dos niñas de 11 kilos cada día, algo bueno tiene cargarlas'', reflexionó la influencer mientras mostraba su cuerpo en un vídeo.
Seguidamente, la hermana de Lila Mangriñan compartió otra historia en la que anunciaba que, por fin, había retomado el deporte, algo que le hacía especial ilusión: ''Vuelta al ruedo después de no sé cuántos meses. Espero poder ser constante de una vez por todas. Hoy muy suave y sin peso porque es mi primer día y toca volver a coger técnica''.
Feliz con sus hijas
A diferencia de muchas otras creadoras digitales que solo se centran en lo positivo, Violeta muestra su realidad tal y como es. En más de una ocasión, la influencer ha confesado que la maternidad le ha traído muchas cosas buenas, pero también muchas preocupaciones y agobios.
A pesar de que a veces ha sentido que le faltan fuerzas, siempre ha dejado claro que Gala y Gia son lo mejor de su vida y que no cambiaría por nada los momentos junto a ellas, ya que tienen una conexión única.