Tallulah Willis sigue con su incansable lucha contra el trastorno dismórfico corporal, una enfermedad de tipo psiquiátrico que se manifiesta como una gran preocupación por un defecto real o imaginario de la apariencia. Un trastorno que ha llegado a alterar su vida cotidiana y por el que ha acudido a varios centros de rehabilitación desde pequeña.
Willis reconoce que no es un trastorno fácil. Tampoco le ayudan los ataques que ha recibido en las últimas semanas en las redes sociales, según ha denunciado la hija de Demi Moore y Bruce Willis en su cuenta de Instagram.
“Creo que es importante compartir esto, que esto suceda, que esto le pase a una persona sanadora en recuperación, que ha sido honesta sobre lo muy enferma que estaba/está y que trabaja diariamente para encontrar seguridad y hogar dentro de su piel”, escribía Tallulah Willis.
Junto a ese texto, la joven adjuntaba algunas capturas de pantalla, donde se puede ver las respuestas que recibe en redes sociales. “Gorda de nuevo”, le decía uno. Otros le mandaban emoticonos de vomito y le escribían “gorda”.
Pero Willis asegura estar más fuerte que nunca: “Estoy muy agradecida de haber llegado a un lugar donde no me afectan palabras extrañas (en su mayor parte). Te amo y me gustas . Yo misma”.
Su madre también ha tenido unas cariñosas palabras. En respuesta a esta publicación, Moore asegura que, con esos comentarios, la gente “sólo puede reflejar su propio miedo” y aseguraba que está “muy orgullosa de ella”. “¡Sé tú en todas tus formas y sigue brillando tu hermosa luz gloriosa!”, terminaba.