Kate Winslet, siempre al natural

“Ni te atrevas” fue la respuesta tajante que dio Kate Winslet al director Craig Zobel cuando éste le sugirió retocar digitalmente su cuerpo en la miniserie Mare of Easttown. La idea era eliminar los michelines de su barriga en una escena de cama en la que aparece desnuda. Antes, la actriz británica ya se había enfrentado a los publicistas que modificaron el cartel promocional de la producción de HBO: “Chicos sé cuántas arrugas tienen mis ojos, por favor, ponedlas de nuevo”, dijo.

Winslett defiende su postura para que el público se identifique mejor con su personaje, la detective Mare Sheehan. “Es una mujer de mediana edad... Cumpliré 46 en octubre, supongo que por eso la gente ha conectado con este personaje de la manera en que lo ha hecho porque claramente no hay filtros. Es una mujer imperfecta y en pleno funcionamiento, con un cuerpo y un rostro que se mueven de una manera que es sinónimo de su edad, su vida y de dónde viene. Creo que estamos un poco hambrientos de eso”, declaró en la presentación.

Winslet, desde su estatus de estrella, y sobre todo desde la seguridad de sus 45 años ha decidido plantar cara a la tiranía de Hollywood, que eleva la delgadez a sinónimo de cuerpo perfecto. Desde que hace más de dos décadas, alzó el vuelo en la proa del Titánic, interpretando a Rose DeWitt Bukater, junto a Leonardo Di Caprio (Jack Dawson), y se desnudó para que éste la pintara “como a una de sus chicas francesas”su físico con curvas, ha sido cuestionado. Eso le llevó a sentir vergüenza, a estar 12 años sin subirse a una báscula y lo que es peor a plantearse abandonar el cine. “Recuerdo sentirme tremendamente acosada por la prensa, hostigada de una manera horrenda. Me llamaban weighty Katie, especulaban con qué dietas hacía, cuánto pesaba...”, recordaba la actriz sobre aquella época en una reciente entrevista.

Incluso se labró fama de ser una persona cortante y respondona. “Los medios me llamaban para que comentara mi físico. Entonces me pusieron la etiqueta de ser muy directa y respondona. Simplemente me estaba defendiendo”.

La británica ha decidido no volver a desnudarse más delante de las cámaras después de hacerlo en la aclamada miniserie ‘Mare of Easttown’

Antes de Titanic , que rodó con 21 años, la actriz trabajó en Sentido y sensibilidad , con 19, y gracias a esta película logró su primera nominación al Oscar, como actriz de reparto. “Tenía 18, 19, 20, 21 años... tu cuerpo cambia tanto entonces, ni siquiera te has asentado en la mujer que vas a ser. Es una época emocional y vulnerable”, hablaba en un podcast grabado a principios de este año.

Esta autoestima de ahora, Winslet la ha conseguido a base de mucho esfuerzo y trabajo psicológico porque las críticas sobre su físico las sufría ya desde el colegio. En el 2017 dio una charla sobre acoso escolar en el WE Day UK: “. “Me llamaban Blubber (sebosa). Me ridiculizaban por querer ser actriz”, relató. “Cuando tenía 14 años un profesor de interpretación me dijo que quizá me podía ir bien si hacía papeles de chica gorda”.

Pero se equivocó ese profesor y la carrera de Winslet es tan prolífica como reconocida:, que incluye títulos como El lector, Revolutionary Road, Steve Jobs, The Holiday, Juegos secretos, Iris, Olvídate de mí, Descubriendo el país de Nunca Jamás , Ammonite ... Ha estado siete veces nominada al Oscar, que ganó en el 2009 por El lector. En esta película, como en Titanic y ahora en la serie Mare of Easttown, entre otras, Winslet aparece desnuda algo que nunca le ha preocupado, pero que a partir de ahora dice que no a volver a repetir: “Ya no me siento tan cómoda haciéndolo. No es una cosa por edad, realmente. Llega un punto en el que la gente va a pensar ‘Oh, ya va ella otra vez’”.

Winslet se quiere como es, y también las marcas la quieren: Lancôme, Longines y L’Oréal, que acaba de nombrarla portavoz mundial para transmitir la idea de que las mujeres han de creer en sí mismas: “La confianza en una misma es el poder. Nunca dudes de ti porque todas lo valemos”. Hace poco, la actriz se unió a la ONU Mujeres en su campañaPandemia en la sombra, que tiene como objetivo motivar y apoyar a todas aquellas mujeres que sufren de violencia doméstica en sus hogares.

A sus 45 años, la protagonista de ‘Titanic’ 
ha decidido plantar cara a la tirania de Hollywood que ensalza la delgadez 
como la perfección

Kate Winslet se ha casado en tres ocasiones. Con el asistente de dirección Jim Threapleton (1998-2001) con quien tuvo a su hija Mia Honey (20), que ya ha realizado su debut como actriz en el filme de terror Sombras , del italiano Carlo Lavagna. Su segundo marido fue el director de cine Sam Mendes (2003-2010), fruto de cuya relación nació su hijo Joe Alfie (17). Y en 2012 se casó con Edward Abel Smith –sobrino del multimillonario Richard Branson– con quien ha tenido a su último hijo, Bear Blaze (7).