Juan Muñoz estalla contra José Mota: "Es mala persona. Su corazón lo tiene en el banco"

"No puedo aguantar más, he callado muchos años y ya es hora de decir la verdad sobre ese señor, que se llama José Mota, y que ha sido incapaz de darme el pésame, sabiendo que mi madre murió hace un mes. Es la gota que colma el vaso. Han sido muchos desprecios, muchas cosas que me hicieron daño y que he guardado en silencio muchos años", ha confesado Juan Muñoz, excompañero de Cruz y Raya de José Mota, a la revista Semana.

Fueron integrantes del dúo cómico pero ahora parece que son enemigos irreconciliables. La madre de Muñoz, Teresa, fallecía hace unas semanas y la pasividad de Mota frente a este acto ha sido lo que le ha hecho estallar. Pero esta situación lleva un tiempo enquistada, pues según Muñoz, Mota es el ahijado de su hijo y no tiene contacto con él desde hace muchos años.

"Hay personas que somos vocacionales y otros que van a por el dinero"

"A ese chico le he ayudado más yo que él a mí. Y quiero que la gente se entere de lo mala persona que es. Nunca fue mi amigo, es muy duro reconocerlo, porque es el padrino de mi hijo, pero jamás se ha preocupado de su ahijado. Creo que no le ha visto desde que hizo la Primera Comunión. José es muy prepotente. Yo he sido siempre el mismo, pero a él le cambió el dinero y la fama. No tiene ni la mitad de dignidad que yo. Hay personas que somos vocacionales y otros que van a por el dinero", ha añadido.

También le ha criticado por sus inicios, pues ha asegurado que él "era mecánico de panadería. Yo estudié Arte Dramático, hablo tres idiomas, toco el piano y la guitarra, he dirigido dos películas… ¿Quién se cree que es? Le falta humildad. Tonto de mí, en un momento de nuestras vidas me engañé a mí mismo creyendo que en José tenía un amigo, cuando nunca lo fue".

El programa, criticado por su racismo

En febrero de 2020 volvió a los titulares el famoso programa humorístico debido a que RTVE estaba muchos vídeos y sketches de los programas de Cruz y Raya que pudieron verse en la cadena pública hace un par de décadas. Algunos espectadores contactaron al Defensor del espectador, Ángel Nodal, por que los vídeos resultaron, años después, “racistas y que favorecen estereotipos que dificultan su integración en la sociedad”.