Jason Momoa, nuevo rey de Atlantis
Artista hawaiano
El actor encarna al superhéroe Aquaman, tras su paso por ‘Juego de tronos’
Cuando era un estudiante secundario en su nativa Honolulu, en Hawái, Joseph Jason Namakahea Momoa, más conocido simplemente como Jason Momoa, tenía una enorme fascinación por el mar. No sólo practicaba surf con sus amigos en sus ratos libres, sino que estaba convencido de que su futuro pasaba por allí y por eso había aprovechado un programa especial para dedicar la mitad de sus horas de clase a la biología marina.
Y aunque luego inició una carrera universitaria con planes de convertirse en científico, la vida tenía otros planes para él. Cuando tenía 18 años, Momoa fue descubierto por el diseñador japonés Takeo Kikuchi, quien le dijo sin parpadear que podía tener un gran futuro como modelo. No se equivocó. Un año después había ganado el concurso de modelaje local y antes de cumplir los 20 ya estaba grabando episodios de Los vigilantes de la playa, que ya en su décima temporada había comenzado a hacerse en su tierra natal.
El artista está casado con Lisa Bonet, exmujer de Lennie Kravitz, con quien mantiene una excelente relación
Hoy, Momoa entiende las razones de aquella temprana fascinación por el mar. Convertido en el absoluto protagonista de Aquaman, la superproducción de la Warner Bros. que intentará derrotar en la taquilla a El regreso de Mary Poppins, el imponente actor que en agosto cumplirá los 40 años está en la cima de su carrera.
No ha sido un camino fácil, sin embargo. No es esta la primera vez que se le considera la nueva gran estrella de Hollywood, aunque todo parezca indicar que, en este caso, las cosas por fin saldrán bien. Cuando comenzó a exhibirse Juego de tronos, Jason tenía uno de los papeles principales como el hombre que lograba ganarse el corazón de Daenerys Targaryen (Emilia Clarke), el bruto pero adorable Khal Drogo. Aquellos que no conocían las novelas de George R.R. Martin se llevaron una gran sorpresa cuando unos pocos episodios después descubrieron que Drogo moría de una infección. Dueño de un físico impresionante, con 1,93 de altura y un rostro en el que se puede ver la sangre hawaiana que heredó de su padre, ya que su madre desciende de alemanes e irlandeses, no abundan los papeles que puedan funcionar para él. Sin embargo, fue el candidato obvio para convertirse en el nuevo Conan siguiendo los pasos de Arnold Schwarzenegger; pero el filme fue un estrepitoso fracaso, y en todo el mundo recaudó la mitad del dinero que costó.
Sin embargo, si en algo su historia ha estado marcada por el éxito es en el plano personal. Jason es el orgulloso padre de los dos niños que ha tenido con la también actriz Lisa Bonet (51 años), a quien conoció a través de un amigo en común 13 años atrás y con quien se casó el año pasado de manera muy discreta en una ceremonia pequeña en su casa de Topanga, California.
El flechazo entre Momoa y Bonet fue inmediato, aunque en realidad, él ya estaba perdidamente enamorado de ella desde que, siendo un adolescente, la veía en el programa de Bill Cosby, en donde tenía uno de los papeles principales. Sin embargo, no se atrevió a confesarle que era su fan hasta muchos años después, cuando los dos hijos de la pareja, Lola Iolani, de 11 años, y Nakoa-Wolf Manakauapo Namakahea, de 10, habían nacido.
Cuando ambos actores se conocieron, Bonet ya era madre de una adolescente, Zoë Kravitz, hoy también actriz y cantante, que se lleva fenomenal con Momoa. De hecho, la actriz de Big little lies lo llama cariñosamente Papa Bear. Es más, el hawaiano también mantiene una gran relación con el padre de Zoë, Lenny Kravitz. Como prueba, el apoyo en Instagram del cantante a la estrella de Aquaman cuando este apareció recientemente en el programa de televisión Saturday Night Live. Para corresponderle, Momoa le regaló a Kravitz dos anillos de calavera hechos a mano, iguales que los que luce él mismo.