Se ha escampado una sensación de inseguridad entre los propietarios de pisos alquilables. Quizá por eso salen menos alquileres que antaño y, desde luego, la oferta no satisface a la demanda. Pero los datos demuestran que los propietarios tienen cada vez más poder de elección sobre su inquilino, lo que los sitúa sin duda en una posición privilegiada.
La presión del alquiler crece más en Catalunya
Catalunya está en la cabeza en cuanto a demanda se refiere. Por cada piso publicado en territorio catalán, hay una media de 318 personas interesadas que se ponen en contacto en un plazo de diez días. Son datos del Observatorio del Alquiler relativos al segundo trimestre de 2024, que además recogen que el trimestre anterior esta cifra era de 80 personas y, a finales de 2023, de 65 personas.
Barcelona se alza como la provincia donde más interesados existen de media de todo el Estado. Un piso en alquiler recibía, en el segundo trimestre, 362 interesados de media, aunque algunos inmuebles han llegado hasta los 2.700 interesados. La cifra se ha más que triplicado desde el primer trimestre, cuando recibía 101 interesados de media.
Tarragona ha casi quintuplicado sus interesados por anuncio publicado, de 21 a 99 de media, entre el primer y el segundo trimestre de 2024. Girona ha pasado de 25 a 66 y Lleida de 20 a 49.
¿Por qué Catalunya tiene más presión que el resto del Estado?
En el resto de España, la media de interesados ha sido de 115 por piso publicado en los primeros 10 días a junio de 2024. Es un dato bajo en comparación con Catalunya, aunque alto en contraste con el primer trimestre, cuando los interesados eran 50, o con los datos de 2019, cuando 16 personas se ponían en contacto por cada piso en alquiler en España.
Las provincias con mayores presiones son Bizkaia (168), València (138), Alacant (116), Santa Cruz de Tenerife (109), Baleares (102) y Madrid (102), todas lejos de los 362 que ostenta Barcelona.
El estudio del Observatorio del Alquiler atribuye esto a las últimas acciones para contener los precios del alquiler y a la ley de vivienda, cuyas medidas Catalunya ha desplegado en su totalidad en los municipios considerados como “tensionados”.
La ley de vivienda no ha conseguido bajar el precio del alquiler en Catalunya
El precio del alquiler alcanza, mes tras mes, récords en Barcelona, a pesar de que la ley de vivienda tenía una intención clara de congelarlo o bajarlo.
Algunos propietarios se han pasado al alquiler temporal, pues, aunque conlleva mayores tributaciones, esquiva de momento la ley de vivienda. El Gobierno, consciente de esto, está trabajando para regular asimismo los alquileres temporales mediante un decreto ley que, por cierto, fue rechazado por el Congreso a mediados de septiembre.
Otros propietarios han decidido poner a la venta sus pisos para despreocuparse de una legislación tan cambiante, pero el precio de la vivienda tampoco se ha aliviado por un aumento de oferta. De hecho, en Barcelona, en 2024, el precio medio del ladrillo también ha alcanzado máximos desde que se tienen registros públicos.
Es urgente una mayor oferta de pisos en alquiler
Ante esta situación, es necesario y corre prisa que aumente la oferta de pisos en alquiler para satisfacer la demanda. Una manera es que los propietarios que tengan pisos vacíos los pongan en alquiler.
Para garantizarse las rentas, existen también servicios de protección del pago, como el de Housfy, que cubren hasta doce meses de impago.