El año se estrena con un aumento de dos décimas de la inflación en enero hasta situarse en el 3%; un incremento que se explica por el incremento de los precios de la energía. En concreto, de las gasolinas y de la electricidad.
De esta manera, enero es el cuarto mes consecutivo en que aumentan los precios, desde aquel mínimo del 1,5% alcanzado en septiembre del 2024; y el 3% es la tasa más alta desde junio del año pasado, según el dato adelantado facilitado hoy por el Instituto Nacional de Estadística (INE).
En el caso de los carburantes, el aumento viene marcado por la cotización al alza del precio del petróleo, y contrasta con la bajada que se produjo en el mismo mes del año pasado.Por lo que respecta al segundo factor que produce este repunte del IPC, la electricidad, aquí interviene la vuelta del IVA de la luz a la normalidad, al 21% después de un largo periodo de reducciones aplicadas para hacer frente a la crisis inflacionista.
Otro elemento que influye es el fin de otra rebajas fiscal, la de los alimentos. Desde el uno de enero, el IVA de los alimentos básicos y el aceite de oliva ya es del 4%y las pastas y aceites de semilla del 10%.
“La subida del IVA al 3% ha sido por el IVA de la electricidad. Sin esto, la inflacion habría bajado hasta el 2,5 o 2,6%”, afirma María Jesús Fernández, economista senior de Funcas, que añade que el aumento de este impuesto introduce un efecto escalón en la tasa de inflación general que durará todo el año y que mantendrá el IPC varias décimas por encima de lo que le hubiera correspondido sin este aumento.
En cambio, la inflación subyacente, la que no tiene en cuenta ni energía ni alimentos frescos, se modera dos décimas y queda en el 2,4%. Esta tasa se considera un indicador más fiable de las tendencias de fondo de los precios, y su moderación sería una buena señal; aunque los economistas no prevén que haya una reducción sustancial ni de a inflación subyacente ni específicamente de los servicios a lo largo de este año.
Esta tasa del IPC llega después de un 2024 a lo largo del cual quedó definitivamente cerrada la espiral de los precios, con una inflación media del 2,8%, que supuso la más baja de los últimos cuatro años. Fue un año en el que los precios fueron de más a menos, aunque con algunos altibajos.
Examinando el mes anterior, en diciembre, las gasolinas y los paquetes turísticos empujaron la inflación al alza hasta el 2,8%. Se esperaba la subida de los carburantes, pero el incremento por los servicios fue una sorpresa desagradable. Después de mostrar señales de contención, en el último mes del año los servicios volvieron a repuntar en una muestra más de su resistencia a frenar su subida. Ahora, este descenso de dos décimas de la subyacente en enero podría ser una indicación de contención.
Con l apubliación de hoy se culmina una semana de datos económicos destacados facilitados por el INE. El martes se confirmó el cierre del 2004 con un aumento de 486.000 nuevos puestos de trabajo y el paro reducido por debajo el 11%; y ayer el robusto crecimiento del 3,2% del PIB. Ahora el arranque del 2025 es con una inflación del 3% en el primer mes del año.
