Las exportaciones chinas marcan récords a la espera de Trump

Comercio internacional

Las compañías aceleran los envíos en el último tramo del año antes de los posibles nuevos aranceles: el superávit con EE.UU. se amplía

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Vehículos preparados para la exportación en Yantai, este enero

Chinatopix/ Ap-LaPresse

Las exportaciones chinas marcaron en el 2024 un récord histórico a las puertas del desembarco de Donald Trump en la presidencia de EE.UU., que promete trastocar el comercio internacional con nuevos aranceles. Las empresas americanas y chinas aceleraron las compras y envíos en el último tramo del año para avanzarse a las posibles tarifas del republicano, que encarecerían el comercio, según las estadísticas de la agencia de aduanas asiática publicada este lunes.

Alentados por el debilitamiento del yuan, en el 2024 los fabricantes chinos miraron al extranjero para compensar la deprimida demanda interna, debido a la crisis inmobiliaria y el consumo débil. Como resultado, las exportaciones crecieron un 6% en el conjunto del año -a 3,57 billones de dólares-, mientras que las importaciones remontaron solo un 1,1% -a 2,58 billones-. El resultado arroja un superávit comercial -diferencia entre exportaciones e importaciones- de unos 990.000 millones de dólares, un 21% más. Para ello se valieron de reducciones continuas de los precios, lo que implica que el volumen exportado crezca un 7,3%, pero su valor un 5,4%. 

Acelerón en el último mes del año y mayor brecha con EE.UU.

Si se pone el foco en el mes de diciembre, las exportaciones crecieron un 11% interanual, por encima de las previsiones de los economistas y cuatro puntos más que en noviembre. Alcanzaron los 336.000 millones. EE.UU. y la región de Asia suroriental alimentaron la subida. Las firmas estadounidenses hacen acopio de producto antes de que se encarezca con aranceles. En el lado de las importaciones, aumentaron un 1%, sorpresa ante la previsión de una caída del 1,5% que manejaban los analistas. El superávit comercial se elevó a 104.800 millones de dólares en el mes, mientras que el balance con EE.UU. se ensanchó a los 33.500 millones de dólares, desde los 29.810 millones de noviembre.

“Los exportadores anticiparon una posible guerra comercial en el 2025 y forzaron las entregas para evitar aranceles más altos en el futuro”, ha dicho Zhiwei Zhang, economista jefe de Pinpoint Asset Management. Así, las exportaciones a tierras americanas crecieron a máximos de dos años en diciembre, con casi 50.000 millones. “La cuestión clave son las políticas de Washington en las próximas semanas y las reacciones políticas de Pekín”, comenta Zhang. Para el conjunto del año, China aumentó sus exportaciones a EE.UU. un 4,9%, a 523.000 millones de dólares. Las importaciones se redujeron un 0,1%, a 163.625 millones, arrojando un superávit comercial de 361.000 millones.

Una alternativa es exportar primero a terceros países para intentar salvar los aranceles americanos. Vietnam ya se ha convertido por primera vez en tercer principal destino de la exportación china en el 2024, hasta un récord de 162.000 millones en ventas, el 18% más.

Anticipo de descensos con la llegada de Trump

Los analistas de Barclays apuntan que la amenaza de los aranceles podría afectar los patrones de exportación en los próximos trimestres, con un impulso de los envíos al extranjero antes de la introducción de nuevos aranceles, para luego dar paso a caídas. Conscientes de ello, las fábricas se apresuraron a enviar producto al exterior antes de que se les encarezca la factura. Trump desembarca en la Casa Blanca en una semana.

A la amenaza del frente americano, China debe sumar los aranceles de Europa a las exportaciones de coches, que elevan las tasas hasta el 45,3% en los casos más extremos. En los intercambios con la UE, la exportación creció un 3% (516.460 millones), con un descenso del 4,4% en lo importado (casi 270.000 millones). De nuevo, atesora un gran superávit, de casi 250.000 millones.

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