Inusual choque dialéctico entre la patronal catalana Foment y el Ministerio de Trabajo a propósito de la rebaja de la jornada laboral. En la presentación de un manifiesto firmado por 18 organizaciones empresariales contra la rebaja de 40 a 37,5 horas semanales, el presidente de Foment del Treball, Josep Sánchez Llibre, acusó al Gobierno de “coacción” y dijo que se trata de “una injerencia inaceptable” porque es un “ámbito que corresponde a los agentes sociales mediante la negociación colectiva”.
El empresario añadió que las manifestaciones de la vicepresidenta Yolanda Díaz van en “la dirección de la imposición, el autoritarismo y la coacción”. La titular de la cartera de Trabajo contestó a través de la red social X acusando a Sánchez Llibre: “Ahora amenazan a los representantes de la ciudadanía para evitar que los y las trabajadoras tengan media hora más de vida al día”. Díaz concluyó su breve mensaje con dureza: “Exijo a Sánchez Llibre que rectifique y respete la democracia”.
El presidente de Foment reflexionó en una breve intervención en la sede de la patronal en Barcelona que los empresarios están de acuerdo en rebajar la jornada pero de manera pactada y sin imposiciones. Y puso como ejemplo que en el 29% de los convenios colectivos firmados en Catalunya este año se ha acordado que la jornada sea de menos de 37 horas a la semana. Sánchez Llibre anunció que la patronal hará una ronda de contactos con los partidos, “sin excepción”, para que las formaciones “sepan lo que se les vendrá encima en el hipotético caso que voten a favor de estas políticas”. El objetivo es que la propuesta sea tumbada en el Congreso.
Esa estrategia se hizo pública justo el día después de que UGT anunciara una reunión bilateral con Carles Puigdemont en Bruselas precisamente para recabar el apoyo de Junts a la rebaja. El partido independentista todavía no ha detallado su postura ante la rebaja de la jornada. Su voto puede ser crucial para sacar adelante el proyecto.
El coste de la medida sería de unos 12.000 millones, según la patronal catalana
CC.OO. también cargó contra las declaraciones del presidente de Foment, pidiendo que “vuelva al pragmatismo y renuncie a este posicionamiento frontal”. En opinión del sindicato, “hay que negociar las medidas que el mercado de trabajo y la economía necesitan”. La vicepresidenta Díaz recordó ayer que la patronal se descolgó de las negociaciones.
Sobre el impacto económico de la medida, Sánchez Llibre calculó que incrementaría los “costes unitarios en un 7%”. La pérdida estimada es de 12.000 millones de euros, según los cálculos de Foment.
El manifiesto, titulado Sí a la economía productiva, sí al diálogo social, sí a la democracia, cuenta con 15 puntos. Entre estos destaca el aviso de que “el exceso de jornada no es un problema en el mercado laboral español; en cambio sí que lo son la productividad baja, el absentismo, el paro y la falta de perfiles profesionales adecuados”.
Entre las 18 entidades firmantes destacan Acra, Aecoc, Barcelona Oberta, Cedac, Confecat, Consell de Gremis de Catalunya, Fecic, Fecavem, Fedequim, Federació Catalana de Cámpings, Gremi d’Arts Gràfiques de Catalunya, Gremi de Restauració, Institut Agrícola Sant Isidre, TexFor, Transcalit-Federació Catalana de Transports de Barcelona, Ufec, UPM y Unió Catalana d’Hospitals.