El vicepresidente del Banco Central Europeo (BCE), Luis de Guindos, considera prioritario que el Gobierno español logre aprobar los presupuestos del 2025, una meta que se le está haciendo cuesta arriba a causa de su debilidad parlamentaria y las grandes diferencias en política económica de los socios de investidura. Carecer de unas nuevas cuentas públicas afecta la confianza económica, reflexionó durante el XXIX Encuentro de Economía en S’Agaró, celebrado este viernes en la localidad catalana. Por ello, mostró su deseo de que salgan adelante en España. “Espero que el Gobierno sea capaz de llegar a un acuerdo parlamentario para aprobar unos presupuestos”, destacó, especialmente en un momento geopolítico altamente complejo.
El tiempo para que el Ejecutivo central presente el nuevo proyecto de Presupuestos Generales del Estado está prácticamente agotado y ya se empieza a asumir que tendrá que prorrogar las cuentas del 2023 al menos durante los primeros meses del 2025. Las dificultades para impulsar la senda de déficit y el techo de gasto o la tortuosa negociación de la reforma fiscal han retrasando el calendario. Poner de acuerdo a los partidos de la investidura le está resultando al Gobierno extremadamente costoso.
“Nadie discutió que se aumentara el déficit hace cuatro años para ayudar a las empresas”, afirma el president
En cuanto a dos de las principales medidas laborales que impulsa el Ejecutivo de coalición, la nueva subida del salario mínimo interprofesional y la reducción de la jornada laboral, el vicepresidente del BCE destacó que los tiempos de trabajo se reducen como consecuencia de que la economía de mercado da lugar a incrementos de la productividad. “Como recomendación genérica –prosiguió– la jornada laboral se ha de distribuir de forma natural, hacerlo con normas y puede llevar al efecto contrario” de lo que se pretende, que es aumentar la productividad. El ministerio de Trabajo ultima la reducción de jornada a las 37,5 horas semanales sin el acuerdo de la patronal y sólo con el concurso de los sindicatos. El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, pidió esta semana a la CEOE que vuelva a la negociación, durante el Congreso de la UGT celebrado en Barcelona.
“Me preocupa una guerra comercial” impulsada por el aumento de aranceles, dice el directivo
Guindos destacó asimismo que el contexto mundial precisa de “liderazgo político y gobiernos estables”, y los presupuestos generales son el pilar de cualquier ejecutivo. Entre los riesgos que el momento geopolítico trae destacó una eventual batalla arancelaria impulsada por la nueva administración Trump. “Me preocupa una guerra comercial; cuando pones un arancel el de enfrente reacciona y provocas un círculo vicioso” que puede impactar sobre el crecimiento económico, subrayó en el marco del encuentro. Ha habido ya algún ejemplo reciente en Europa a costa de los coches eléctricos. Tan pronto, el ejecutivo europeo anunció un aumento de aranceles a los vehículos fabricados en China, el gobierno del país asiático activó una investigación contra las importaciones de porcino de Europa, entre otros artículos.
Illa defiende una fiscalidad que no perjudique el crecimiento y sufrague los servicios públicos
Las jornadas de S’Agaró contaron también con la presencia del presidente de la Generalitat, Salvador Illa, que abrió el encuentro junto a Anna Balletbò, presienta del FIOP, Josep Lluís Bonet, presidente de la Cámara de Comercio de España, el propio Guindos y Jordi Juan, director de La Vanguardia . Soledad Núñez, subgobernadora del Banco de España, o Peio Belausteguigoitia, director general para España de BBVA, participaron también en el encuentro, entre otros.
El BBVA afirma que la opa al Sabadell aumentará el crédito a familias y empresas en 5.000 millones de euros al año
Ante los directivos y economistas que llenaban la sala, Illa defendió una fiscalidad que “no penalice, que no sea un desestímulo, pero también que permita tener” mejores servicios públicos. El presidente subrayó la necesidad de devolver la deuda y recordó que hace cuatro años, en plena pandemia y la economía paralizada por el confinamientos, “nadie discutió” que se aumentara el déficit para ayudar a las empresas mediante los ERTE o los préstamos ICO y a los hogares. Continuó rebatiendo las críticas que suelen llegar desde la empresa sobre la elevada fiscalidad del Gobierno, y recordó que la presión fiscal española está dos puntos por debajo que la media europea. “En esta materia, pocos experimentos. La prosperidad, o es compartida, o no será socialmente aceptable”, zanjó. Que el crecimiento económico se traduzca en una mejora general del nivel económico de la población es un mensaje que Illa lleva transmitiendo desde que accediera al cargo. Hace apenas unos días, durante el aniversario de CCOO de Catalunya, pidió a los empresarios que suban los salarios en Catalunya.
Por su parte, el director general del BBVA en España, respondió a los empresarios contrarios a la opa al Sabadell que la operación les permitirá “crecer, ser más fuertes y solventes y tener mayor capacidad de crédito”. Belausteguigoitia aseguró que, ante estos “recelos”, el BBVA ya ha anunciado que aumentará a otros seis meses las líneas de circulante en todas las pymes procedentes del Sabadell. La nueva entidad –aseguró– aumentará el crédito a familias y empresas en 5.000 millones de euros al año.
El crecimiento sostenible, la economía y el reto energético y la banca en el contexto europeo fueron otros de los asuntos que se trataron. El encuentro de S’Agaró continúa mañana, una jornada que clausurará Nadia Calviño, presidenta del Banco Europeo de Inversiones.
Más eficiencia en la transición energética
Repsol defendió este viernes que las soluciones para impulsar la transición energética deben ser menos costosas y más eficientes. Durante una mesa redonda sobre “Economía y reto energético”, el director de estudios de Repsol, Antonio Merino, puso el ejemplo de la planta de combustibles 100% renovables de Cartagena. La planta, dijo, no implica coste para el erario público y reduce las emisiones. El catedrático de la UB Mariano Marzo subrayó por su parte que la transición energética necesita de un uso intensivo de minerales raros, cuya cadena de suministro controla China. En el coloquio también participaron Rafael Doménech (BBVA Research) y la directora de la cátedra de sostenibilidad de la UB, Maite Costa. Xavier Mendoza, director general de Esade, moderó la mesa.