La digitalización impulsada por la pandemia está lejos de ser un fenómeno puntual derivado de la necesidad, sino que ha llegado para quedarse y convertirse en uno de los motores de la recuperación de la economía española. Así lo apunta el informe Sociedad Digital en España 2022 elaborado por la Fundación Telefónica y presentado ayer en Madrid en un evento protagonizado por Sergio Oslé, consejero delegado de Telefónica España, y Carme Artigas, secretaria de Estado de Digitalización e Inteligencia Artificial.
“La economía digital ha pasado de contribuir un 19% al PIB español antes de la pandemia a hacerlo un 22% en 2021. Si fuera un sector vertical sería el segundo sector de la economía española, solo superado por la construcción y nuestra visión es que en 2025 aportará un 40% del PIB”, aseguró Carme Artigas.
El despliegue del 5G creará 300.000 empleos, según un informe de Fundación Telefónica
Tras esta generosa previsión están, entre otros motivos, datos que recoge el informe elaborado por la Fundación Telefónica. Entre ellos, que mientras la economía española en su conjunto cayó un 9,8% por el impacto de la crisis derivada de la covid, el sector digital apenas registró una caída del 2,4%, lo que pone de manifiesto su mayor resiliencia. “Esto demuestra que una economía más digitalizada es una economía más resistente a los impactos adversos”, destacó Carme Artigas.
Por otro lado, el impulso que la digitalización inyectará a la economía española vendrá derivado del despliegue de la tecnología 5G, apuntó el consejero delegado de Telefónica España. “El 5G será clave para el impulso económico porque va a suponer toda una revolución en el mundo empresarial, en el que el margen de digitalización todavía es muy amplio”, aseguró Sergio Oslé.
De hecho, el informe apunta que el despliegue de la tecnología 5G representa una oportunidad única para reactivar la economía española, ya que, según las estimaciones que recoge el informe de la Fundación Telefónica, están previstas inversiones de más de 5.000 millones de euros que van a permitir mejorar la competitividad de las pymes españolas y la creación de 300.000 empleos. A su vez, esta nueva tecnología será clave para impulsar una nueva metodología de trabajo que impulsará la sostenibilidad medioambiental y reducirá las emisiones totales en el conjunto de la Unión Europea hasta en un 20%.