El presidente de la patronal CEOE, Antonio Garamendi, cargó este jueves contra la gestión del Gobierno central en el proceso de negociación de la reforma laboral y la subida de las cotizaciones sociales. Visiblemente enfadado, el líder de los empresarios pidió “seriedad” al Ejecutivo y lamentó la dualidad de opiniones en el mismo. Lo manifestó en declaraciones a la prensa después de participar en el XX congreso de directivos CEDE celebrado en Córdoba.
En ese mismo escenario, la vicepresidenta primera y ministra de Asuntos Económicos, Nadia Calviño, recordó que la reforma del mercado de trabajo es un hito que debe alcanzarse para “desbloquear el siguiente pago del plan de recuperación”. La titular de Economía aseguró que “enfilamos la fase decisiva de ese diálogo social” y añadió que la semana próxima espera poder contar con una nueva propuesta.
Precisamente unas horas antes, Garamendi pidió “saber en global qué se quiere hacer” y que cesen las filtraciones interesadas. En su opinión, no es bueno estar en medio de la dualidad política que representan las dos posturas del Ejecutivo. Llegó a decir que la negociación por parte del Gobierno central parece enfocada a perseguir un “trofeo electoral”.
Cambios
Calviño vincula la llegada de nuevas ayudas europeas a cambios en la legislación laboral
Garamendi recordó que tras firmar el anterior acuerdo de pensiones, Podemos presentó una serie de enmiendas al acuerdo suscrito. “Nosotros cumplimos cuando firmamos un papel”, dijo. Garamendi se preguntó “qué validez me da el Gobierno” a un compromiso si un partido que está dentro del Ejecutivo puede impugnarlo como ha hecho con el pacto de pensiones.
El presidente de la CEOE, en su conferencia ante 800 directivos, advirtió que las reformas que plantea el Gobierno no son lo que demanda Europa. Garamendi compartió coloquio con José Luis Bonet, presidente de la Cámara de Comercio de España, quien indicó respecto a la labor del Gobierno que “poner dificultades, trabas no es lo adecuado” en una recuperación que aún no se ha consolidado.
En relación con esa recuperación, Garamendi advirtió que las previsiones de crecimiento son demasiado optimistas y que la patronal hace tiempo que advierte que el incremento del PIB en España estará por debajo del 5%.
En el congreso, Isidro Fainé, presidente de la Fundación de la Confederación Española de Directivos y Ejecutivos (CEDE), insistió en que el sector público debe “sacar adelante la agenda de reformas comprometidas con la Unión Europea en el marco del fondo de recuperación”. Fainé alertó también sobre la inflación, el déficit público y la gestión post pandemia: “a corto plazo se dibujan también algunos obstáculos, y especialmente las turbulencias que previsiblemente surgirán cuando las autoridades económicas empiecen a retirar las numerosas medidas de estímulo ahora existentes”.
Salida de la crisis
El Rey anima a los directivos a “trabajar juntos” para conseguir una recuperación sólida
Fainé, que preside también la Fundació Bancària La Caixa y su holding de participadas Criteria, participó en el acto de clausura del congreso de directivos con la ministra Calviño, el presidente de la Junta de Andalucía, Juanma Moreno, y el rey Felipe. El Monarca pidió a los empresarios y directivos “trabajar juntos para encontrar los caminos más oportunos y adecuados para abordar los nuevos retos a los que nos enfrentamos que nos garanticen una recuperación sólida”. En su intervención, el presidente de la Junta reflexionó que se necesita de una “estabilidad” política y regulatoria como fórmula para no perder el “proceso de reactivación económica” tras salir de la pandemia.
El congreso de CEDE de este año giraba en torno a los cambios derivados de los “Nuevos Tiempos, nuevas oportunidades”. Entre otros, en el congreso intervino el consejero delegado de CaixaBank, Gonzalo Gortázar, quien enumeró algunos detalles del proceso de integración de Bankia. El banquero apostó por “combinar la transaccionalidad de lo digital con la personalización por medio de lo que nos ofrece el uso de los datos”.
En otro coloquio el presidente ejecutivo de Naturgy, Francisco Reynés, analizó junto con el presidente de Agbar, Ángel Simón, el nuevo mundo que se abre tras la pandemia. Sobre la gestión empresarial, Reynés dijo que “tener una estructura accionarial que tenga los mismos propósitos es importante para que importen los mismos valores”.
Precisamente el responsable de uno de los accionistas de Naturgy, GIP, intervino también en el congreso. El consejero delegado de GIP, Adebayo O. Ogunlesi, aprovechó su conferencia para alabar la gestión de las grandes empresas españolas: “somos unos inversores entusiastas en España, probablemente una de las economías más dinámicas de la UE”.
En este sentido, el consejero delegado de Cellnex, Tobías Martínez, aseguró que las compañías españolas “son bien recibidas a nivel general” en el extranjero.