El 76% de los ‘riders’ perdería el trabajo si fuera contratado, según la patronal
Emergencia económica
Adigital critica el cambio legal que prepara el Gobierno para declararlos asalariados
La patronal Adigital ha empezado a ejercer presión contra la nueva ley que prepara el Gobierno de Pedro Sánchez para reconocer a los repartidores de plataformas como trabajadores asalariados, en consonancia con el criterio del Tribunal Supremo y la Inspección de Trabajo.
La asociación, que representa las empresas afectadas –Glovo, Deliveroo, Uber Eats, Stuart–, emitió ayer un comunicado en el que alertaba de la pérdida de puestos de trabajo y de la caída de facturación en el sector de la restauración si los riders son considerados trabajadores asalariados en España.
Las plataformas extrapolan a España el caso de Uber Eats en Ginebra después de fijar la laboralidad
Extrapolando el caso de Uber Eats en Ginebra –que desde septiembre subcontrata a los repartidores a una empresa de logística porque la ciudad prohíbe la figura del rider autónomo–, la patronal alerta de que el 76% de los repartidores perderá esta fuente de ingresos. En cifras absolutas, esto significa que se van a quedar sin trabajo unas 23.000 personas de las 29.3000 que conforman este colectivo en España.
“El coste de subcontratarlos o de asumirlos como trabajadores propios provoca que haya menos repartidores disponibles, que suban los precios y que el servicio empeore. Además, esta medida conlleva que el delivery deje de ser sostenible en ciudades de menos de 100.000 habitantes y que el reparto se limite a horas punta en ciudades medianas de hasta 250.000 habitantes”, apuntó ayer el director general, José Luis Zimmermann.
Además, la patronal alertó de las pérdidas que el cambio legal puede suponer para el sector de la restauración, que pasa por un crítico momento a causa de la pandemia del coronavirus. Según sus cálculos, los restaurantes dejarían de ingresar unos 250 millones de euros el año posterior al cambio de modelo (lo que supone un 35% de los 708 millones generados en el 2019).
A nivel de clientela, la patronal cifra en 11 millones las personas que se van a quedar sin acceso al servicio, lo que representa el 18% del mercado actual, y en 13 millones de personas las que verán reducido el horario de servicio (38% del total)
Zimmermann lamenta los efectos de la laboralidad y aboga por mantener la relación mercantil entre la plataforma y el repartidor. “Solo así podemos garantizar el funcionamiento completo del servicio”. Para mejorar las condiciones de trabajo, que tanto han criticado sindicatos y el propio el colectivo de los riders , la patronal quiere proponer una serie de beneficios nuevos. “En la mesa social constituida junto a los sindicatos la semana pasada vamos a defender un modelo que mantenga la figura del autónomo pero que ofrezca coberturas en caso de despido, accidente, maternidad o formación”.
Zimmerman avanzó que en caso de verse obligadas a operar con riders asalariados, la gran mayoría de plataformas optará por el modelo de la subcontratación en lugar de la contratación directa, “una opción aun más inviable” .