Esencia, identificación con unos colores, vinculación histórica, tradición, respeto a las raíces, vuelta a los orígenes. Estos son algunos de los argumentos que el Real Valladolid esgrimió para justificar su cambio de escudo e imagen. Mayor protagonismo del violeta, siglas legibles, llamas que podrían representar un incendio producido en 1561 (no está claro el origen del símbolo), una nueva tipografía ("Pucela Font", del tipógrafo vallisoletano Carlos de Miguel) y la eliminación de la corona de laurel son las principales transformaciones de la insignia del recién ascendido a LaLiga Santander.
Polémica con el nuevo escudo
La eliminación de la laureada no es bien recibida por gran parte de la afición vallisoletana
Este último detalle fue el más polémico de todos, ya que muchos aficionados lo consideraban el elemento más identificativo del club. También están los que lo entienden como la eliminación de un resto franquista, ya que la laureada fue la condecoración que el dictador Francisco Franco concedió a la ciudad de Valladolid en 1939 por su papel en la Guerra Civil. Los cambios, a menudo, son recibidos con rechazo y la gente requiere un tiempo para adaptarse a ellos.
Nuevos diseños
El minimalismo se impone como la corriente principal en la creación de nuevos escudos
Sea como sea, hay dos cosas claras: por un lado, los clubs de fútbol entienden que necesitan una renovación de su imagen para adaptarse a las nuevas tendencias estilísticas y potenciarse a nivel de marketing; y, por otro lado, el minimalismo se impone como la corriente principal. La reducción de elementos simbólicos, la simplificación de formas y líneas y la modernización tipográfica son las características comunes a todos los nuevos escudos que están aflorando recientemente en el mundo del fútbol. Estos son algunos de los principales ejemplos del movimiento al que acaba de sumarse el Valladolid.
2016
Manchester City
El equipo mancuniano anunció su nueva imagen durante el Boxing Day de la temporada 2015-16 y la estrenó en la campaña siguiente. El nuevo escudo recuperó su forma circular tradicional, eliminando el águila, en consonancia con las características del minimalismo. Los demás elementos se conservaron, aunque si se ha potenciado la intensidad del color y se ha modernizado la tipografía.
2016
West Ham
El equipo londinense presentó el nuevo escudo en 2014, pero no comenzó a utilizarlo como parte de su imagen corporativa hasta 2016. De nuevo, elementos prescindibles como la cinta bajo el escudo con el nombre del club desaparecen y la tipografía se moderniza. Además, el castillo también se eliminó. Representaba las torres que escoltaban Upton Park, por lo que, tras la demolición del estadio, los aficionados votaron y decidieron prescindir de su imagen en el escudo como cierre de una etapa.
2017
Juventus
Quizás el cambio más impactante y más minimalista de la época reciente, también uno de los más criticados e incomprendidos. La Juventus primó la adaptabilidad, versatilidad y fácil reconocimiento de la identidad del club a la hora de cambiar su escudo en 2017. Dos líneas, la letra inicial del nombre del equipo y los colores que lo representan. Suficiente.
2017
Atlético de Madrid
El escudo del club del Manzanares ha sufrido drásticas transformaciones a lo largo de su historia, por lo que la última de ellas, estrenada en 2017, no ha sido la más impactante. Todos los elementos se mantienen y la forma, aunque un poco más redondeada, es la misma. Solo cambian el tono de los colores azul y rojo y la representación del oso y el árbol, mucho más simbólica y menos fiel a la tradicional figura del Oso y el Madroño.
2020
Deportivo Alavés
El club vasco anunció su nueva imagen corporativa poco antes de su centenario, que se cumplió en 2021. El banderín, elemento central del escudo desde su fundación en 1921, se mantiene como eje de la nueva imagen. Sin embargo, la forma se simplifica y se apuesta por una circunferencia, mucho más visual y fácilmente adaptable a todos los formatos. Además, la tipografía también se moderniza y se vuelve más lisa y clara.
2021
Inter de Milán
Por último, el Inter de Milán ha ido simplificando el diseño de su escudo, aproximándose cada vez más a los preceptos del minimalismo. En 2021, lo llevó al extremo: un círculo azul y negro, una "I" y una "M". Mantiene la esencia, la forma y los elementos identificativos de siempre, pero los simplifica al máximo. Menos es más.