Freddy Rincón conducía el vehículo en el que sufrió el accidente mortal

Freddy Rincón iba al volante del vehículo cuando sufrió el accidente de tráfico que le costó la vida, según aseguró este miércoles el fiscal general de Colombia, Francisco Barbosa. El exfutbolista de Real Madrid, Nápoles y Corinthians, entre otros equipos, colisionó la madrugada del 11 de abril contra un autobús de servicio público en la ciudad de Cali, al suroeste del país, mientras viajaba con tres personas más. Tras dos días ingresado en la Clínica Imbanaco por un trauma craneoencefálico severo, falleció a la edad de 55 años.

“El vehículo en el que se transportaba Freddy Rincón era conducido por él. A esta conclusión se llegó soportados en los forenses de medicina legal, en los estudios técnicos, corroborada con los testigos que se encontraban dentro del vehículo y con las cámaras de la zona”, explicó Barbosa.

La versión del fiscal general contradice a los familiares del exfutbolista, que habían señalado que iba en el asiento del copiloto y que el vehículo se saltó un semáforo en rojo antes de colisionar contra el autobús. No obstante, ninguno de ellos estuvo presente en el lugar ni el momento del accidente. “Es importante aclarar al país esto, que había estado en duda los últimos días; decirlo claramente y de manera pública”, puntualizó Barbosa ante las especulaciones que habían surgido sobre el caso.

Uno de los integrantes del vehículo había informado con anterioridad a las autoridades que el 'coloso de Buenaventura' se encontraba al volante en el momento del siniestro, pero el hijo del exfutbolista, Sebastián, negó esta versión. “Pido al conductor que iba manejando que se sincere y espero que Dios haga justicia y que la Fiscalía haga su trabajo. Yo lo único que puedo decir es que mi papá no iba manejando y eso me deja muy tranquilo porque, ante las falsas acusaciones, tarde o temprano, toda la verdad saldrá a la luz”, declaró un día después de su muerte.

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Asimismo, el fiscal general confirmó que la investigación no ha concluido, sino que este es un “primer aporte” a la espera de recibir los análisis de medicina legal restantes.

Dueño de una técnica hipnótica, Freddy Rincón formó parte de una generación dorada del balompié colombiano junto con René Higuita y Carlos Valderrama. Suyo fue el gol más importante de la historia de la nación, cuando, en el minuto 92, puso el empate en el marcador del partido que enfrentaba a la selección cafetera con Alemania Occidental, en la última jornada de la fase de grupos del Mundial de 1990. El tanto fue suficiente para clasificar al país a los octavos de final por primera vez en su historia.

A nivel de clubes, 'el coloso' se convirtió en un ídolo en su país natal, donde defendió las camisetas de Independiente Santa Fe y América de Cali. Tras una breve etapa por Brasil, dio el salto a Europa en 1994 para debutar con el Nápoles. Con sus siete goles en 38 partidos y su despliegue de potencia física, se ganó el cariño de la afición y el interés de Jorge Valdano, entrenador del Real Madrid. Un año después de aterrizar en Italia, volvería a mudarse, esta vez, en dirección a la capital española. Sin embargo, su paso por la entidad blanca no fue tan prolífico. Jugó pocos partidos (21), casi siempre partiendo desde el banquillo, en una época manchada por el “racismo muy marcado” que él mismo denunciaría en 2012 en una entrevista con Marca.

Volvió a Brasil en 1996 para vestir los colores del Palmeiras y, después, de Corinthians, donde se agigantaría su leyenda. En las tres temporadas en el ‘equipo del pueblo’, se ganó el brazalete de capitán y permitió al conjunto alzar el primer Mundial de Clubes de la historia. Colgó las botas en 2004, después de pasar por Santos, Cruzeiro y, de nuevo, Corinthians, aunque regresó a los terrenos de juego de manera temporal en 2013 para jugar un amistoso con el América de Cali.