Lukaku sufre un nuevo caso de racismo en el fútbol
Serie A
El jugador del Inter de Milán fue el foco de las burlas de los hinchas del Cagliari
El racismo en el fútbol volvió a ser protagonista este fin de semana en la Serie A. En esta nueva ocasión, la víctima fue Romelu Lukaku, jugador incorporado al Inter de Milán este mercado de verano, que recibió burlas por parte de la afición del Cagliari el domingo en el Sardegna Arena.
Ocurrió cuando el delantero se disponía a lanzar un penalti con el marcador en empate a 1. Un sector de los hinchas locales comenzó a imitar gritos de simios para mostrar su rechazo hacia el jugador. Lukaku, sin embargo, no se dejó intimidar por las burlas y marcó el que sería el 1-2 definitivo para la victoria.
Después del gol, el belga optó por controlarse, y se limitó a dirigir una simple mirada desafiante hacia la grada. Sin embargo, el lunes, el jugador expresó sus sentimientos y condenó el racismo a través de un mensaje en las redes sociales.
“Durante el último mes, muchos jugadores han sufrido abusos racistas. Yo también los viví ayer. El fútbol es un juego para que todo el mundo lo disfrute y no deberíamos aceptar ninguna forma de discriminación que avergüence a nuestro deporte. ¡Espero que las federaciones de fútbol de todo el mundo reaccionen con fuerza en todos los casos de discriminación!”, comenzó Lukaku.
El belga siguió pidiendo la colaboración de todas las personas: “Las redes sociales (Instagram, Twitter, Facebook) necesitar trabajar mejor con los clubs de fútbol porque cada día se ve como mínimo un comentario racista bajo una publicación de una persona de color. Levamos años diciéndolo y sigue sin haber consecuencias. Damas y caballeros, es 2019, en lugar de avanzar estamos retrocediendo y pienso que como jugadores tenemos que unirnos y mandar un mensaje sobre este asunto para que este juego se mantenga limpio y divertido para todos”.
El de Lukaku es el enésimo caso de discriminación racista a futbolistas de color en Europa. Hace pocos días, Paul Pogba fue objeto de insultos racistas a través de Twitter y el Manchester United apostó por hacer todo lo posible por identificar a sus autores para que fueran sancionados. Por otro lado, este verano Marvin Sordell anunció su retirada a los 29 años y alegó haber sufrido bullying y racismo a lo largo de su carrera en Inglaterra. Y la temporada pasada, Mario Balotelli denunció insultos en un partido de la Ligue 1. Son solo varios ejemplos de un problema que, lamentablemente, sigue a la orden del día.