El Barça firma una remontada de orgullo ante el Inter
Barça, 2 - Inter, 1
El conjunto barcelonista se impone con dos golazos de Luis Suárez
Luis Suárez celebra un gol
La garra, la calidad y el orgullo impulsaron al Barça ante el Inter. El ardor competitivo lo despertó la salida de Arturo Vidal, determinante, lo certificó Luis Suárez, con dos goles monumentales, y lo completó Messi, que tuvo arrestos para protagonizar una jugada desequilibrante antes de asistir al uruguayo en el tanto de la victoria. Por deseo, pulmones y clase el Barcelona reaccionó a tiempo ante un Inter que maravilló a ratos y que al final se vio totalmente desbordado por el huracán barcelonista.
El conjunto de Valverde terminó por conquistar una victoria importantísima en un grupo en el que habrá batalla hasta la última jornada. Tras empatar en Dortmund una derrota habría puesto contra las cuerdas al Barça, que ve ahora el futuro inmediato con mucha más claridad. Todos remaron a una sobre el césped para brindar una remontada de mérito a unos espectadores que sufrieron y gozaron.
Victoria importantísima del Barça en un grupo en el que habrá batalla hasta la última jornada
Volvió Messi tras su nueva lesión y lo hizo de entrada. Su presencia en el once, segunda titularidad de la campaña, hacía albergar entre el barcelonismo esperanzas de vivir una noche de Champions electrizante. Al final terminó por serlo con una reacción que hizo enardecer al Camp Nou, que pasó de la zozobra a la euforia en una segunda parte maravillosa. Aunque el argentino todavía está sufriendo su particular pretemporada y le falta ritmo es capaz de fabricar una jugada como la que originó el gol de la victoria, certificado con un control orientado y un remate imparable de Suárez. Messi se había deshecho de los rivales que le salieron al paso antes de combinar con el uruguayo. Ellos sí se entienden. Ellos sí se hablan dentro y fuera del campo. De momento, con Griezmann forman más un Tricicle que un tridente, por aquello que tiran más de mímica que dialéctica, pero como dúo resultaron determinantes. Porque antes Suárez había empatado con una volea de dibujos animados a pase de Arturo Vidal.
El chileno fue el revulsivo, el uruguayo la espoleta y Messi un catalizador pero cabe reconocer también su mérito a Valverde, que con el marcador en contra recurrió al chileno, cambió el sistema, mandó a la ducha a Busquets y colocó de doble pivote a un Arthur completísimo y a un De Jong, que mejoró en una posición más centrada. Con más oxígeno, gracias a Vidal, con más voltaje y mejor colocado, el Barça pasó pro encima del Inter tras el entreacto.
De momento, Messi y Griezmann forman más un Tricicle que un tridente
El conjunto italiano, que aterrizaba en el Camp Nou con el depósito de confianza al máximo y con las ideas muy claras, tuvo su oportunidad en la primera parte. Es un conjunto trabajado por la batuta de su entrenador, Antonio Conte, que se pasó todo el encuentro moviendo los brazos y repartiendo instrucciones cual director de orquesta. A pocos metros de él Ernesto Valverde ponía caras de pocos amigos porque el desarrollo de los acontecimientos se torcería muy pronto para el Barcelona.
Tras una escaramuza inicial de Griezmann, es decir un tirito flojo desde la frontal, se avanzó el Inter. Lo hizo en una jugada desafortunada para el Barça. Piqué acudió al corte pero su rechace rebotó en Busquets. El balón salió suelto y cayó a los pies de Lautaro Martínez, una perla con mucho recorrido por delante. El argentino le ganó por piernas a Lenglet, que acudía con la ambulancia, y batió de remate cruzado a Ter Stegen.
Peor decorado, imposible para el Barça. Iba perdiendo de salida ante el equipo que menos goles encaja de Europa. Sin embargo, el equipo de Conte no se limitó a resguardarse en su cueva sino que no rifaba el balón, salía o lo intentaba de forma asociativa y cuando superaba la primera línea de presión blaugrana, en ocasiones intensa, en otras de plastilina, se plantaba en las inmediaciones del área de Ter Stegen. Todo cambiaría en la segunda mitad.
Aunque el Barcelona tenía más balón, el Inter sabía mejor qué hacer con el esférico cuando lo recuperaba. Los de Valverde trataron de hacer las cosas con tiento y buena letra tras el mazazo de salida pero poco a poco se fueron descomprimiendo. Algún retazo suelto de De Jong, que necesita entrar más en juego y que lo haría cuando Busquets fue relevado. Algún arranque de un Arthur más vertical. Un cabezazo arriba de Griezmann, que volvió a no encontrar su sitio. Versos dispersos mientras Suárez protestaba más que jugaba (luego se resarciría) y Messi lo probaba en individual con poco éxito.
Había demasiadas piernas delante, un entramado que se recogía como una mantis religiosa y abría las alas como una mariposa. El segundo gol italiano estuvo a punto de llegar en diversos lances antes del descanso. Por fortuna para el Barcelona Ter Stegen sacó una mano milagrosa tras un testarazo de Lautaro Martínez y Semedo llegó al corte in extremis en otro intento del delantero, que recordó al Piojo López que tantos estragos causaba en el Estadi, y en un remate de Barella que llevaba marchamo de gol.
El portugués jugó de lateral izquierdo por lesión (otra) de Junior. Lo pasó muy mal con el balón pero al menos tuvo piernas para defender. No se puede decir lo mismo de un Piqué y un Lenglet angustiados a campo abierto. Valverde se enfadaba y, lo que es más relevante, el Camp Nou se impacientaba y empezaban a sonar silbidos. Aquello tenía pinta de bronca si el resultado se ampliaba pero el repunte llegaría.
Quedaba toda la segunda mitad y el Barça necesitaba alguien que le hiciera levantarse. El papel en el reparto tenía un destinatario: Arturo Vidal. Con él sobre el campo Valverde ordenó un paso adelante y todo cambió. El dispositivo del Inter saltó por los aires y se vio a otro Barça, también con un Dembélé vertical sobre el campo. Un Barça repleto de orgullo, de sangre caliente y de fuerza de voluntad.
Ficha técnica
Barcelona, 2 - Inter de Milán, 1
Barcelona: Ter Stegen; Sergi Roberto, Piqué, Lenglet, Semedo; Busquets (Arturo Vidal, min.52), De Jong, Arthur; Messi, Griezmann (Dembélé, min.66) y Luis Suárez.
Inter de Milán: Handanovic; Godín, De Vrij, Skriniar; Candreva (D’Ambrosio, min.71), Barella, Brozovic, Sensi (Matteo Politano, min.79), Asamoah; Alexis Sánchez (Gagliaedini, min.66) y Lautaro Martínez..
Goles: 0-1, min.3: Lautaro Martínez. 1-1, min.58. Luis Suárez. 2-1, min.84: Suárez.
Árbitro: Damir Skomina (Eslovenia). Mostró cartulina amarilla a Barella (min.6), Griezmann (min.9), Piqué (min.22), Sergi Roberto (min.52), Abidal (min.76), Alexis Sánchez (min.77, cuando estaba en el banquillo) y Antonio Conte (min.82).
Incidencias: partido correspondiente a la segunda jornada del grupo F de la Liga de Campeones disputado en el Camp Nou ante 86.141 espectadores, según datos facilitados por el club azulgrana.