El menudo Higuita se hace grande en la Volta

Quinto en Sant Feliu de Guíxols el primer día, cuarto en La Molina, tercero en Boí Taüll, segundo en Cambrils y primero en el podio final de la Volta. Nadie puede decir que Sergio Higuita (Medellín, 24 años) no haya sido justo vencedor. No ha habido nadie más regular que el colombiano del Bora esta semana en las carreteras catalanas. En Montjuïc se pudo comprobar que el líder tenía buenas piernas, las mejores. Porque respondió con total solvencia al ataque de Carapaz, en la víspera aliado, ahora rival, que llegó en la penúltima subida al Castell de Montjuïc, a 13 km de meta. Y porque después neutralizó varios intentos, de Johanessen y de Ayuso, pese a que no tenía necesidad. Solo para demostrar quién era el más fuerte.

Ha sido un maillot franjiverde muy peleado con seis líderes diferentes. El único que ha repetido y ha podido conservar el liderato ha sido él en la última etapa y le ha servido para llevarse la Volta. Es su primera carrera por etapas en el ProTour. Su triunfo fue celebrado por la numerosa colonia de colombianos que se acercaron a la montaña mágica de Barcelona, donde los aficionados presenciaron seis ascensiones con mucha pelea pero sin cambios en la general.

El más regular

Quinto en Sant Feliu de Guíxols, cuarto en La Molina, tercero en Boí Taüll, segundo en Cambrils y primero en el podio final

Higuita, pequeño (1,66 metros) y menudo (57 kg), se ha hecho grande en su primera temporada en el Bora. Antes ya tenía una etapa en la Vuelta a España (2019) y un tercer puesto en la general de la París-Niza (2020). Fue en su anterior equipo, el Education First, donde se ganó el apodo de Monster.

En 2019 se presentó con la escuadra estadounidense y dijo que su estilo era parecido al del catalán Joaquim Purito Rodríguez o del murciano Alejandro Valverde, porque subía bien pero además era rápido en grupos reducidos o en llegadas con algo de desnivel. A todos les pareció una locura. Pero en su primera carrera, el Tour de California, fue segundo en la general solo superado por un tal… Tadej Pogacar.

Ayer aliado, hoy rival

El líder respondió con total solvencia al ataque de Carapaz, que llegó en la penúltima subida al Castell de Montjuïc, a 13 de meta

“Éste es como el monstruo de Gila”, le definió el director, el exciclista Jonathan Vaughters, que entonces sí le creyó. “Es pequeño pero peligroso”, avisó. Algo que se comprobó el sábado en la sexta etapa, donde dio un vuelco increíble a la carrera, con un ataque a 133 km de meta a pesar de que solo estaba a 7 segundos del liderato.

Antes de aquella presentación, a Higuita, formado en el Manzana-Postobón, lo cedieron en ese inicio de 2019 unos meses en el Euskaltel-Euskadi, para que se adaptase a la forma de correr de Europa. En principio tenía que estar hasta agosto. Pero hizo tan buenos resultados en Mallorca (4.º en Deia), Valencia (13.º), Andalucía (7.º) o en las clásicas como la Miguel Indurain (3.º) o la de Amorebieta (4.º) que en mayo ya lo repescaron para que debutase en California.

Gran inicio

El Bora pensó en él para cubrir el hueco de Peter Sagan y el colombiano ya lleva tres victorias con su nuevo equipo

El Bora pensó en él y en Vlasov para cubrir el vacío que dejaba la salida de Peter Sagan y el colombiano está respondiendo desde el inicio en la nueva andadura. Ganó el campeonato de Colombia, una etapa en el Algarve y ahora la Volta a Catalunya. Higuita, bien escoltado por su compañero Hindley, aguantó sin problemas los seis pasos por el puerto. Es el quinto escarabajo que se impone en la Volta tras Mejía, Buenahora, Quintana y Miguel Ángel López. “Era un recorrido que me gusta mucho, con una subida explosiva y agónica”, relató.

“Estoy muy feliz. Temía quedarme sin piernas después del esfuerzo del sábado con Carapaz pero todos veníamos justos, con mucha fatiga porque la carrera ha sido muy dura desde el primer día. Esperaba ataques de todos, de Carapaz, de Ayuso, Almeida, de Nairo… de todos. Y se vieron pero supimos controlar la carrera”, analizó. Así que la victoria en la séptima y última etapa en la avenida Rius i Taulet se la jugó un grupo de 18 ciclistas y fue para el italiano Bagioli (Quick Step).