El piloto del helicóptero sufrió “desorientación espacial”. Este es el término que se utiliza en el informe oficial sobre el siniestro aéreo registrado en el área de Los Ángeles que le costó la vida a Kobe Bryant, de 41 años, y a Gianna, su hija de 13, entre otras ocho personas que se hallaban en el interior del aparato.
Uno de los fallecidos es el piloto Ara Zobayan, de 50. No falló la máquina, falló el hombre, según el informe final. Sucedió el 26 de enero del 2020. Los investigadores federales de seguridad aérea concluyen ahora que el accidente se produjo porque Zobayan no siguió las pautas de su entrenamiento en vuelo entre nubes y esto hizo que se desorientara.
Mural en recuerdo de Kobe Bryant y su hija
El piloto debería haber estabilizado el helicóptero, elevarlo lentamente y declarar la emergencia para recibir ayuda de los controladores aéreos, señala el documento de la Junta de Seguridad Nacional de Transporte (NTSB). Pero los investigadores del siniestro determinaron que Zobayan no llevó a cabo todos estos pasos. Una vez en el aire, y con una visión limitada, los expertos señalaron en su documento que el piloto perdió el sentido de dónde se hallaba y perdió la referencia visual. Se pensó que ascendía cuando el aparato se dirigió contra la ladera de una montaña, en la zona de Calabasas.
Bryant, que se había jubilado recientemente como jugador de los Lakers, se dirigía a un partido de baloncesto de su hija y otras amigas y familiares. Mamba Negra, como se le apodaba, viajaba habitualmente en helicóptero para evitar las cotidianas colas de tráfico en la metrópolis. El aparato despegó del John Wayne Airport y debía cruzar Los Ángeles hasta la ciudad de Thousand Oaks, donde Bryant colaboraba en una academia deportiva.
Mejor ‘crash’ que accidente
La autoridad federal establece que el piloto
no siguió las pautas para volar entre las nubes
Bruce Landsberg, vicepresidente de la NTSB, estableció este martes una matización lexicológica. No se debe recurrir a la palabra “accidente”, remarcó, sino a la de crash o choque. “Tenemos una idea muy correcta de lo que ocurrió y sabemos absolutamente como prevenir este tipo de impactos”, subrayó Landsberg.
En medio de esa poca visibilidad y mala meteorología, Zobayan recibió la autorización del controlador del tráfico aéreo para emprender viaje y volar en esas condiciones, algo que regularmente se permite.
La policía investigando el accidente en Calabasas, California
Un testigo explicó durante estas pesquisas que el Sikorsky S-76B desapareció mientras él viajaba por la autopista, algo que quedó grabado en vídeo. En esa situación, Zobaya comunicó por radio que intentaba ascender a 4.000 pies de altura. Los datos reflejan que lo que hizo en realidad fue ir hacia abajo. “Sin referentes exteriores, tuvo una mala percepción”, se afirma.
Desde un principio, Vanessa, la viuda de Kobe y madre de Gianna, culpó al piloto. Otros responsabilizaron a la compañía propietaria y operadora del aparato. La NTSB informó que tal vez el piloto sintió la presión de completar el vuelo desde dentro o por la política de la empresa