Después de dar gato por liebre en la deslumbrante gala conjunta de la F-1 en el O2 Arena de Londres, mostrando el viejo AMR24 decorado con los colores y patrocinadores que lucirán este año, Aston Martin descubrió este domingo desde Silverstone su verdadero nuevo bólido para esta temporada, el AMR25, el último modelo antes de la era Adrian Newey (que ya trabaja en la edición del 2026).
Se trata de una evolución profunda del anterior coche en un momento en el que la mayoría de la parrilla opta por el continuismo (ya que en el 2026 entra la nueva normativa técnica).
Vista frontal del AMR25
Revisión profunda
La aerodinámica ha cambiado en un 95% para lograr un coche “más fácil de manejar y más predecible”, según indicó el nuevo team principal, Andy Cowell
Aston Martin ha apostado por una intensa renovación de la aerodinámica “en un 95%”, con el objetivo de conseguir un coche “más fácil de manejar y más predecible”, según indicó el nuevo team principal, Andy Cowell, con el objetivo de volver a entrar en el grupo de élite, del que cayeron el año pasado con resultados mediocres.
El AMR25 de Aston Martin, en una toma lateral
Así, para intentar ser más equilibrado y consistente, las partes más retocadas son los alerones y los pontones, más rebajados para guiar mejor el flujo de aire y lograr más agarre. También son notables los cambios en la cubierta del motor y en el suelo.
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Un coche del gusto de Fernando Alonso, que comentó: “Aprendimos mucho en el 2024 y el equipo lo ha estado utilizando como fuerza motriz a medida que nos acercamos a esta temporada con el AMR25. Sé que el equipo ha estado trabajando duro en el coche para asegurarse de que estemos listos. Estoy emocionado de volver a la pista”. Será hoy en Bahréin en un ensayo privado.
