Resultados

Loading...

Quiero ser como Henry

Mundial | Perfil

La capitana de Francia, heroína por su gol contra Brasil en la prórroga, es la todocampista que quiere plantar cara a Estados Unidos

Megan Rapinoe: Anti-Trump y orgullo LGTBI

Henry ejerce su liderazgo dentro y fuera del campo

Getty

Poco se podía imaginar Gurinder Chadha cuando estrenó en el 2002 Quiero ser como Beckham que su obra terminaría siendo “una película de culto”. Así la define Amandine Henry (Lille, 28/IX/1989), capitana de la selección francesa que hoy tratará, junto al resto de sus compañeras, de tumbar a Estados Unidos en los cuartos de final del Mundial. También la Balón de Oro Ada Hegerberg asegura haber visto al menos cien veces la cinta de VHS que corría por su casa.

El objetivo del largometraje era remover conciencias, hablar de la diversidad religiosa, cultural y social de Londres, pero también se abría una puerta a la esperanza para unas niñas: la de ser futbolistas. El fútbol ha sido durante demasiado tiempo cosa de hombres en el que la mujer ha quedado relegada a un segundo plano.

“Película de culto”

‘Quiero ser como Beckham’ fue su fuente de motivación para ser futbolista

Quiero ser como Beckham fue una fuente de inspiración y motivación para muchas chicas que pensaron: ¿por qué no puedo ser yo la que un día llegue a ser jugadora profesional? Ahora los pósters de la celebridad del Manchester United que aparecían en la habitación de Jess son reemplazados por los de Alex Morgan, Lucy Bronze o la propia Henry. Son el espejo en el que mirarse porque ven que el sueño puede cumplirse.

Como la mayoría de las grandes estrellas presentes en Francia, la primera experiencia de la centrocampista del Olympique de Lyon fue en un equipo de niños. Destacaba tanto por encima del resto que los rivales del Iris Lambersart lo llamaban “el equipo de la chica”. El paso a la adolescencia provocó que las diferencias físicas empezaran a notarse. Sus compañeros de equipo eran cada vez más altos, más fuertes. Era el momento de desviar su camino para jugar sólo con mujeres.

La carrera de Henry estuvo a punto de terminar antes de iniciarse por culpa de una grave lesión de rodilla cuando tenía 19 años. Se sometió a un trasplante de cartílago para rellenar el agujero que tenía en su rótula derecha. Tuvo que estar parada un largo tiempo, pero regresó para demostrar su calidad en las filas del todopoderoso Olympique de Lyon. Es una todocampista que aporta soluciones en defensa y también en ataque. Con el balón sabe jugar en corto y en largo. Además, destaca también por pisar área y por poseer un potente disparo lejano. Lo demostró en el partido inaugural del campeonato con un soberbio gol contra las coreanas.

Es tanta la confianza de Corinne Diacre con Henry que cuando aceptó el cargo de seleccionadora en el 2017 le entregó el brazalete de capitana en detrimento de Wendie Renard. Ni más ni menos. Su año y medio en Portland le sirvió para crecer, sobre todo en el aspecto físico. Su gol en la prórroga contra Brasil la convirtió en la heroína de su país. Como muestra de respeto, lo celebró junto a sus compañeras del banquillo con su gesto militar característico.

A años luz de los hombres

Henry es una de las mejor pagadas del mundo: gana 480.000 euros anuales entre salario y publicidad

Amandine Henry es una de las jugadoras mejor pagadas del mundo. Según L’ÉQUIPE, entre el salario y los ingresos publicitarios percibe anualmente 480.000 euros. Una cifra que demuestra que las mujeres cada vez están más valoradas, aunque siguen a años luz de las millonadas que cobran sus compañeros de profesión.