Gene Hackman, su esposa y su perro llevaban muertos algún tiempo y fueron encontrados en habitaciones diferentes, según se desprende de las primeras investigaciones. La investigación todavía está abierta, pero la familia del actor cree que la causa de la muerte fue una intoxicación por monóxido de carbono. La compañía de gas ha desvelado que participa en la investigación por el fallecimiento del intérprete, de 95 años, y de su esposa, Betsy Arakawa, de 63.
Gene Hackman y Betsy Arakawa en 2003
El célebre actor estadounidense y su mujer, pianista de música clásica, fueron hallados muertos hoy junto a su perro en su domicilio de Santa Fe, Nuevo México (EE.UU.). Según informan fuentes policiales a medios locales, se desconocen por ahora las circunstancias de la muerte del carismático intérprete -retirado del cine en el 2004- y su mujer. Desde Variety, medio especializado de Hollywood, aseguran que la oficina del sheriff les ha confirmado que “no había indicios inmediatos de que se tratara de un crimen”.
Con el paso de las horas, van saliendo a la luz más detalles sobre el hallazgo de los cuerpos. Las autoridades dijeron que fue un empleado de mantenimiento quién descubrió los cadáveres tras encontrarse la puerta principal de la casa entreabierta, aunque no había señales de que hubieran forzado la entrada.
El cuerpo de Hackman se encontraba en la cocina y los de Arakawa y el perro en el baño y, junto a estos dos, había pastillas esparcidas de un frasco de medicamentos abierto. Se cree que tanto el actor como su esposa cayeron repentinamente al suelo y ninguno mostraba signos de traumatismo por fuerza contundente, según la declaración jurada.
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Hackman fue uno de los actores más polifacéticos de Hollywood con una extensa carrera que dejó títulos como La conversación, El jurado o Arde Mississippi y ganador del Oscar por las películas Sin perdón o French Connection. Contra el imperio de la droga. De mirada profunda y rictus serio, su sola presencia de imponente físico -medía cerca de dos metros-mejoraba cualquier película en la que apareciera. Fue una estrella a su pesar durante más de cuatro décadas de carrera hasta que puso punto y final a los 75 para llevar una vida más tranquila como escritor de novelas.