Comienzo brillante del Life Victoria (★★★★✩)

Crítica de música clásica

Elsa Dreisig canta con un estilo sutil, lleno de humanidad, con una voz cálida, de peso, ideal para el lied

La soprano Elsa Dreisig abrió el ciclo Life Victoria con el pianista Romain Louveau en Sant Pau Centre Modernista

La soprano Elsa Dreisig abrió el ciclo Life Victoria con el pianista Romain Louveau en Sant Pau Centre Modernista

Elisenda Canals

Life Victoria ★★★★✩

Intérpretes: Elsa Dreisig, soprano; Romain Louveau, piano. Lugar y fecha: Sala Domènech i Montaner, Sant Pau (11/II/2025)

Este ciclo sigue sorprendiendo con la calidad y el buen hacer. Elsa Dreisig canta con un estilo sutil, lleno de humanidad, con una voz cálida, de peso, ideal para el lied y para la cercanía que impone esta sala privilegiada, sobre una versión pianística de Romain Louveau sensible a la palabra, que interpretó en verdadera sesión camerística.

Abrió el programa el ciclo Dichterliebe de Schumann que nos llevó al terreno de lo sutil, con convicción y una bella capacidad narrativa de Dreisig, que conecta inmediatamente con el espectador, en una versión además pianística estilizada y muy personal. Con buen criterio –pequeño descanso para la soprano– intercalaron una breve pieza para piano de Othman Louati (1988): Aphorisme après Schumann con sutiles coincidencias. Compositor también presente en la segunda parte del concierto con Aphorisme après Tristan que precedió otra novedad, ésta en el terreno del lied: tres de Les chansons de Bilitis de la compositora Rita Ströhl (1865-1941) contemporánea de Debussy y muy poco conocida aún.

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Otra de las virtudes de Dreisig además de su bella voz, es su naturalidad y versatilidad en diferentes registros expresivos, lo narrativo, lo dramático, lo sensual, con buena gama de matices y potencia vocal que subrayaron los momentos luminosos al igual que los sombríos de Schumann y de Fauré.

Otra de las virtudes de Dreisig además de su bella voz, es su naturalidad y versatilidad en diferentes registros expresivos

No resultó muy alejada en términos expresivos la segunda parte del recital, dedicada a Gabriel Fauré y centrada en el ciclo La bonne chanson sobre nueve poesías de Paul Verlaine. Ambos intérpretes mostraron su calidad y la delicada consustanciación con música y texto.

Hemos hecho poco por conmemorar el centenario de la muerte de Fauré el pasado año, habiendo sido un compositor con tantas relaciones con compositores catalanes y españoles.

Antes de este magnífico recital, intervinieron la joven soprano Belén García, y Esther Vilar al piano, en una versión de tres números del Liederkreis op.39 de Schumann en la que el piano fue protagonista por el volumen y que se cerró con una bella versión de la soprano, muy en estilo, de uno de los Tres Poemas ( de Rimas de Bécquer) de Joaquín Turina.

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