Viaja de manera continua: en los últimos siete días ha volado desde Madrid a Buenos Aires en dos ocasiones y ha aterrizado otras tres en el aeropuerto JFK de Nueva York saliendo desde Barajas. Es el aparato matriculado como EC-MXV, primero de los flamantes Airbus A350-900 de Iberia, bautizado en homenaje a Plácido Domingo , el personaje español que ha tenido más aviones con su nombre.
El tenor, actualmente barítono, de 78 años ha saltado esta semana a la primera línea informativa las acusaciones de acoso sexual por parte de nueve mujeres, ocho cantantes y una bailarina a lo largo de tres décadas desde finales de los años 80. Por el momento, todas han querido mantenerse en el anonimato salvo una, que sí quiso ser identificada: Patricia Wulf , mezzosoprano que cantó con Domingo en la Ópera Nacional de Washington.
Mercado aeronáutico
Spanair sorprendió con vuelos regulares entre Madrid y Washington con sus Boeing 767-300
Precisamente Domingo fue el director general de esa compañía operística con sede en el Centro John F. Kennedy para las Artes Escénicas entre 1996 y 2011, consolidando una estrecha relación con la institución que arrancó diez años antes de asumir esa dirección.
Con el tenor ya en el puesto, la compañía aérea Spanair sorprendió al mercado aeronáutico estableciendo vuelos regulares directos entre Madrid y la capital de Estados Unidos con sus entonces modernos Boeing 767-300 y convirtiéndose paralelamente en inédita patrocinadora de muchas de las galas organizadas en ese teatro y teniendo al tenor como uno de los pasajeros más mimados y frecuentes en los vuelos entre los aeropuertos de Barajas y Dulles.
Primeros Airbus
Gonzalo Pascual quiso homenajear personalmente a una serie de “españoles universales vivos”
“El entonces presidente de la compañía, Gonzalo Pascual, estaba obsesionado con el servicio a bordo y superar a Iberia en todo y a veces el presupuesto se disparaba con algunos productos”, cuenta a La Vanguardia un antiguo responsable de servicio a bordo de Spanair.
“Hubo una época en que el presidente quiso que siempre se llevara caviar a bordo en los vuelos a Washington, aunque después vio que eso fue excesivo y esos detalles especiales solo se servían cuando viajaban a bordo amigos personales o personas a las que Pascual quería agasajar especialmente. Eran otros tiempos muy diferentes a los actuales”, recuerda el directivo de la compañía hoy desaparecida.
Gonzalo Pascual, socio de Gerardo Díaz Ferran en el grupo Marsans, quiso homenajear personalmente a una serie de personajes en coincidencia con la llegada del nuevo siglo y los primeros aviones Airbus a Spanair. Bajo el denominador de “españoles universales vivos” puso nombre a varios aparatos con la presencia de la celebridad en cuestión.
El primero de ellos fue Camilo José Cela en octubre de 2000 en el aeropuerto de Madrid. Un mes después la ceremonia se repitió en Sevilla, esta vez protagonizada por Placido Domingo, que estaba dirigiendo La Traviata en el Teatro de La Maestranza. “Estoy muy orgulloso de que un avión lleve un nombre de alguien que ha viajado tanto como yo”, dijo entonces sin rubor el tenor tras rociar con vino el morro del A321 con su nombre y firma estampados.
Ninguna mujer
El proyecto era muy ambicioso y prácticamente estaban cerrados nombres como el de Induráin
El proyecto de la compañía era muy ambicioso y prácticamente estaban cerrados nombres como Miguel Induráin, Eduardo Chillida o Severiano Ballesteros. Curiosamente no se pensó en ninguna mujer y además el plan, iniciado a buen ritmo, se fue ralentizando. No se retomó hasta dos años más tarde, cuando fue el escultor Juan de Ávalos el “español universal vivo” homenajeado. Este artista tuvo una carrera estrechamente relacionada con el régimen franquista, siendo su obra más reconocida las esculturas de la Basílica de la Santa Cruz del Valle de los Caídos.
Tuvieron que pasar muchos años para que un cuarto español fuese homenajeado por Spanair: Juan Antonio Samaranch, que asistió al acto de bautizo del airbus en el aeropuerto de El Prat, aceptando con agrado que el aparato llevase bajo las ventanas de los pilotos no su nombre de pila sino el de ‘Marqués de Samaranch’ con su firma. Aquel marquesado fue otorgado por el rey Juan Carlos I el 30 de diciembre de 1991 en favor del entonces presidente del Comité Olímpico Internacional.
Campaña lenta
Samaranch fue el último homenajeado por Spanair en 2006 antes del cambio de accionariado
Samaranch fue el ultimo homenajeado por Spanair en 2006 durante en la etapa previa al cambio de accionariado de la compañía. La campaña de “españoles universales vivos” fue tan lenta que dos de los cuatro personajes fallecieron durante su vigencia: Cela en 2002 y de Ávalos en 2006. Ya en la nueva y ultima fase de la compañía, 2009-2012 solo se bautizó un avión: Vicente Ferrer. Fue en otoño de 2009, pocas semanas después del fallecimiento y como parte de una campaña de apoyo a su fundación.
Placido Domingo no solo es el español que más aviones ha tenido con su nombre sino que excepcionalmente también ha tenido dos aparatos en vuelo al mismo tiempo y en dos compañías. Así, mientras el Airbus A321 de Spanair seguía volando, en verano de 2011 Iberia homenajeó al tenor poniendo su nombre a un Airbus A340-300. El acto se realizó siendo presidente de Iberia Antonio Vázquez, reconocido admirador de Domingo. Aquel día, un emocionado Vázquez, también cantante, se arrancó junto al homenajeado con unos versos de la Zarzuela Luisa Fernanda. Desde aquel día y hasta el cierre de Spanair, medio año después, el tenor tuvo dos aviones volando por medio mundo en dos compañías diferentes.
Por cuestiones relacionadas con el leasing de los aparatos y la veteranía de las aeronaves, el Placido Domingo de Iberia se retiró en 2013, aunque su nombre volvió a volar en verano de 2018 cuando se decidió recuperarlo para darle nombre al primer A350-900 de la compañía. Este modelo está marcando el futuro de la empresa, sustituyendo prácticamente toda la flota de largo radio de la compañía.
Plácido regresa al cielo y ahora lo hace con un bimotor que puede volar hasta 15.000 kilómetros sin repostar y gastando notablemente menos que sus predecesores. En los aviones gemelos de esta nueva flota de largo radio, al tenor le han seguido otra serie de nombres un tanto eclécticos como Paco de Lucia, Selección Española de Futbol, Museo del Prado y Juan Sebastián Elcano.