Andrea Levy, una catalana en Madrid que apuesta por la cultura como “cuestión de estado”
Verso libre catalán
La barcelonesa, exdiputada en el Parlament, es la nueva concejal de Cultura en el Ayuntamiento de Madrid
Una catalana al frente de la política cultural de la ciudad de Madrid. Una rareza en tiempos de hondas trincheras identitarias que casa muy bien con el perfil heterodoxo, un verso libre dentro del Partido Popular, que ha caracterizado la carrera de Andrea Levy (Barcelona, 1984) y por el que ha recibido tantos aplausos como críticas de sus adversarios y –más veces de lo deseado por ella– también de personas de su propio partido.
Licenciada en Derecho por la Universitat de Barcelona, Levy ha cambiado la parte alta de la bancada de la oposición en el Parlament de Catalunya, donde ha vivido los días más convulsos del proceso independentista y la crisis del PP catalán, por la concejalía de Cultura, Deporte y Turismo en el Ayuntamiento de Madrid. Un nombramiento controvertido en el que ha tenido mucho que ver su buena sintonía con Casado.
Asidua a los festivales de música alternativa
Levy mantiene con Madrid un estrecho vínculo profesional y sentimental desde que Mariano Rajoy la escogiera, en junio del 2015, como vicesecretaria de estudios y programas del PP. Asumió entonces una posición clave en un partido que empezaba ya a sentir el desgaste por los casos de corrupción, la emergencia de Ciudadanos y Podemos, y la crisis catalana. Un cargo en la primera línea de batalla que le hizo descubrir la dureza de la política madrileña, pero también, quizá como válvula de escape de otros sinsabores (los elogios mediáticos iniciales se transformaron en muchos casos en duros palos), le permitió adentrarse en los círculos literarios –muy comentada en las secciones de Gente fue su amistad con el escritor Manuel Jabois, también con el cantautor Nacho Vegas– y de música alternativa.
Asidua a los grandes festivales musicales, en el 2016 coincidió con Pedro Sánchez en el FIB de Benicàssim: ambos se declaran seguidores de Muse. Entre sus bandas de referencia, pasado y presente del indie español, Los Planetas y La Habitación Roja.
La semana pasada, quizá pensando ya en sus nuevas obligaciones, acudió a las Ventas a la tradicional corrida de toros de la Beneficencia, presidida por el rey Felipe.
Lectora compulsiva, Levy señaló en una entrevista en la revista cultural Zenda algunas de sus obras de cabecera, como La casa de Bernarda Alba, de Federico García Lorca –“el libro que me ha hecho reivindicativa y revolucionaria”–, La divina comedia, de Dante, Rojo y negro, de Stendhal, y Pulp de Bukowski. Como admite también su animadversión por los superventas de Stephen King.
Uno de los puntos débiles en esta nueva etapa es su falta de experiencia como gestora cultural. Poco se conocen de sus planes y proyectos. Sí que defendido en más de una ocasión la necesidad de que la cultura sea considerada una “cuestión de Estado” y las instituciones se impliquen en su promoción y ayuda. Como referencia cercana puede tener la labor de Santiago Fisas, otro dirigente del PP catalán que ejerció de consejero de Cultura en la Comunidad del 2004 al 2009.