Comparativa freidoras 2024: las mejores opciones del mercado

¿Qué es una freidora?

En primer lugar, hay que distinguir entre las freidoras domésticas y las industriales. Estas últimas están diseñadas para la hostelería y tanto su precio como su rendimiento son bastante elevados en opinión de la mayoría. Los modelos domésticos, también llamados de sobremesa, tienen características y funciones mucho más limitadas.

Las freidoras domésticas tienen un recipiente donde se vierte el aceite, el cual se calienta por una resistencia eléctrica. Una vez alcanzada la temperatura seleccionada, se vierten los alimentos en el aceite y se espera a que estén fritos. Las mejores son las de aceite y agua, pues preservan el aceite limpio más tiempo.

Ventajas y campos de aplicación de las freidoras

Las freidoras más populares son las convencionales, aunque cada vez se venden más modelos que no utilizan aceite. Las de aire, por ejemplo, apenas necesitan una cucharada de aceite para que los alimentos queden dorados y crujientes. ¿La mejor? La que más se adapte a tus necesidades en tu opinión.

¿Qué tipos de freidoras existen?

Freidora eléctrica convencional

Las freidoras eléctricas convencionales no pueden faltar en ninguna comparativa ni reseña de freidoras, ya que siguen siendo las más vendidas. Suelen tener entre uno y tres litros de capacidad, con una potencia que oscila entre los 1000 y los 2000 vatios. Son aparatos que ocupan bastante sitio, por lo que tendremos que hacerle un buen hueco en la encimera.

Las mejores freidoras convencionales suelen incorporar filtros para preservar el aceite limpio. Estos electrodomésticos disponen de un termostato que mantiene estable la temperatura del aceite, normalmente hasta los 190 °C.

Freidora de aceite y agua

Sus características son similares a las de las freidoras convencionales, solo que disponen de un depósito inferior de agua donde se recogen los restos de la fritura. De este modo, el aceite se mantiene limpio durante mucho más tiempo que en los modelos convencionales. Asimismo, se evita que se mezclen sabores.

Para eliminar el agua de este tipo de freidoras basta con abrir una válvula situada en su parte inferior. En opinión de muchos usuarios, son de las freidoras más eficientes, pues permiten ahorrar mucho aceite.

Freidora de aire caliente

Son las que cosechan mejores opiniones entre quienes las usan. Son como pequeños hornos de convección, pues el aire circulante es calentado por unas resistencias eléctricas. Al pasar entre los alimentos, estos se cocinan por dentro y se doran por fuera, como si se hubieran frito.

Las freidoras de aire solo requieren una pequeña cantidad de aceite, apenas una cucharada sopera. Hay modelos que sirven para asar pequeñas piezas y descongelar alimentos. Algunos usuarios afirman que la textura y sabor de los alimentos preparados con estos aparatos no son iguales a los de las freidoras convencionales.

Evaluación de producto: freidoras

En opinión de muchos, no hay nada como el sabor de las patatas fritas de freidora. Solo estos aparatos pueden mantener la temperatura estable (entre 175 y 190° C) mientras se añaden los alimentos, incluso aunque estén congelados. Veamos a continuación con más detalles algunos de los modelos de nuestra comparativa.

Principales marcas y alternativas

Las freidoras están diseñadas para hacernos la vida más fácil. No tendrás que ser un experto para manejarlas aun si te decantas por los sofisticados modelos de aire. Si dudas sobre cuál elegir, te presentamos cuatro de las freidoras con más reseñas positivas y con mejor relación calidad-precio.

Freidora Tefal Filtra 3l

Inauguramos nuestra selección de freidoras con toda una superventas, la freidora Tefal Filtra de tres litros y 2400 vatios de potencia. De acero inoxidable, este modelo incluye filtro de aceite y tapa de cocción con ventana. Permite regular su temperatura hasta los 190 °C. Se desmonta rápidamente, lo que facilita su limpieza.

Las reseñas de los usuarios destacan su rapidez en calentarse, su sencillo uso y su fácil limpieza. De hecho, casi todas sus piezas son aptas para el lavavajillas, excepto la resistencia. En algunas opiniones se afirma que es necesario ir limpiando a menudo la cubeta. No obstante, sus resultados son comparables a los de freidoras de gama superior.

Freidora Princess 182727

La freidora Princess 182727 tiene tres litros de capacidad y 2000 vatios de potencia. Su característica más destacada es que es capaz de mantener fría la parte inferior de la cubeta. De este modo, los restos de comida que caen al fondo no se queman, manteniendo el aceite limpio. Está fabricada en acero inoxidable lacado en negro.

Quienes usan esta freidora destacan la gran cantidad de comida que cabe en la cubeta. Subrayan también en sus opiniones la rapidez en calentarse gracias a sus dos mil vatios de potencia. Además, excepto la resistencia, todas sus piezas son aptas para el lavavajillas. En alguna reseña se avisa de que hay que evitar limpiarla con productos químicos agresivos que puedan dañar el lacado.

Freidora Moulinex Minifrito AF220010

Si no tienes mucho sitio en tu encimera, esta freidora compacta es la ideal. Con solo 1 litro de capacidad y 1000 vatios de potencia, la freidora Moulinex AF220010 es capaz de preparar hasta seiscientos gramos de comida. Dispone de tapa con ventana que puedes bajar mientras fríes. Su termostato es graduable de 150 a 190 °C.

En las opiniones destacan las que resaltan el poco espacio que ocupa, su rapidez en calentarse y lo deliciosas que quedan las frituras. También se destaca la tapadera, que evita salpicaduras de aceite y facilita ver, a través de una ventana, cómo se fríen los alimentos. En algunas reseñas, se advierte de que la cubeta no es desmontable, lo que no facilita su limpieza.

Freidora Jata FR326E

Cerramos nuestra comparativa con otro modelo compacto, la freidora Jata FR326E, con 1,3 litros de capacidad y 1000 vatios de potencia. Dadas sus reducidas dimensiones, cabe en cualquier rincón de la encimera. Incluye cestillo y tapa de cristal. Su cubeta no es extraíble. Su exterior es de acero inoxidable antihuellas; su interior está recubierto de antiadherente ecológico libre de sustancias como PFOA (ácido perfluorooctanoico) y teflón.

En las reseñas, los usuarios explican que, para un óptimo resultado, no debe freírse mucha cantidad de alimento a la vez. Resaltan que se calienta rápidamente y que te avisa con un piloto luminoso cuando está lista. Lo mejor de esta freidora es su simplicidad y eficacia, aunque solo es válida para una o dos personas. En algunas opiniones se advierte de que puede chorrear algo de aceite por fuera al colgar el cestillo para escurrir.

Ventajas y desventajas de las freidoras

Ventajas

Desventajas

Criterios de compra

Tipo de freidora

En toda comparativa, las freidoras sin aceite siempre ocupan lugares destacados. Pero ¿son lo que necesitas? Ten presente que el resultado puede no coincidir con lo que en tu opinión consideras un alimento bien frito. Eso sí, en opinión de muchos nutricionistas, son una de las maneras más sanas de cocinar los alimentos.

Las freidoras más asequibles son las convencionales, ya que puedes encontrarlas a partir de treinta y cinco euros. No son las más rápidas en calentarse, pero cuando lo hacen, mantienen muy bien la temperatura. Las de agua y aceite son algo más caras, pero compensan gracias a que mantienen el aceite limpio más tiempo.

Capacidad

Para hogares con pocos miembros, una o dos personas, lo mejor es elegir una freidora compacta. Normalmente, sus cubetas tienen 1 o 1,5 l de capacidad. Para una familia de cuatro o más miembros, lo más acertado es comprar un modelo de 2 o 3 l.

Ten en cuenta que una cosa es la capacidad de la cubeta y otra la capacidad de fritura. Esta es la cantidad máxima de alimentos que podemos preparar de una vez. Suele oscilar entre los 600-800 g en freidoras de 1 l y los casi 2 kg en modelos con cubeta de 6 l de capacidad.

Potencia

Cuantos más vatios tenga la freidora, más rápidamente alcanzará el aceite la temperatura deseada. El consumo eléctrico, por tanto, también será mayor. Si el tiempo es importante para ti, lo mejor es que adquieras un modelo de, al menos, 2000 vatios.

La potencia de una freidora compacta de 1 l de capacidad debe ser de 1000 vatios. Los modelos de 3 o más litros de capacidad precisan, como mínimo, 2000 vatios para un resultado óptimo. En las reseñas, los usuarios comentan frecuentemente que las freidoras de aire tardan más en cocinar los alimentos. Su potencia debe ser, como mínimo, 1500 vatios.

¿Qué alternativas hay a las freidoras?

Si no consumes muchos alimentos fritos, la mejor opción es una buena sartén. O puedes utilizar un microondas barato usando muy poco aceite y siguiendo unas sencillas instrucciones.

Por otro lado, si tienes un horno Teka, este te permitirá freír diversos alimentos utilizando la función de convección. Las patatas fritas al horno quedan así riquísimas. ¡Pruébalo!

FAQ

¿Qué es el punto de humo del aceite y por qué es importante en las freidoras?

Cuando el aceite de la freidora empieza a humear es porque se está quemando. Se dice entonces que ha alcanzado el punto de humo. Cuanto más lo reutilizamos, antes alcanza ese punto. En opinión de los expertos, el aceite de oliva virgen extra es el que menos se degrada con el uso a pesar de tener un punto de humo bajo (160 °C). Le sigue el de girasol y, por último, el de soja.

¿Cómo usar la freidora adecuadamente?

En nuestra comparativa de las mejores freidoras también caben consejos. En primer lugar, no tires los alimentos a la cubeta, deposítalos en el aceite caliente con el cestillo o la espumadera. Tampoco sobrecargues la freidora demasiado o los alimentos se pegarán unos a otros y no se harán bien. Cuando acabes de freír, tapa la cubeta y deja enfriar el aceite si tienes que cambiarlo o colarlo. Nunca mezcles aceite nuevo con el usado.

¿Cuándo cambiar el aceite de la freidora?

Utilizar el aceite más de la cuenta no solo altera el sabor de los alimentos, también puede afectar a nuestra salud. Freír patatas y verduras aumenta la acidez del aceite dado su contenido en agua. La carne y el pescado añaden al aceite grasas, aromas y sabores. Si el aceite está oscuro, humea pronto o huele a fritanga, deberás sustituirlo. En opinión de muchos cocineros, lo mejor es cambiarlo cada cuatro usos.