Para sorpresa de muchos, el origen de la lasaña no es del todo italiano. Hay registros de que en la Antigua Grecia llamaban pastitsio a una receta similar, que consistía en largas láminas de pasta con salsas entre cada una servidas en platos especiales de metal, a modo de cazuelas.
Expertos e historiadores culinarios aseguran que la lasaña específicamente nació luego del lasanon (a través del latín lasanum), un pastel plano griego -proveniente de la familia de los pastitsio- cuyo nombre hace alusión al envase o cazo en el que se cocinaba. Este empezó a cortarse en tiras largas y anchas y pasó a llamarse lagum. Según cuentan, era el plato favorito del filósofo Cicerón y del poeta Horacio.
Con el tiempo, los contactos bélicos y culturales entre Grecia y el Imperio Romano hicieron que esta receta llegara a Italia y evolucionara. Fueron los italianos quienes desarrollaron las primeras máquinas para la elaboración de la pasta de lasaña como actualmente la conocemos.
Por su histórico origen, su aclamada popularidad y las infinitas posibilidades que existen para su elaboración, el 29 de julio se declaró el Día Mundial de la Lasaña, una jornada cuyo objetivo es resaltar la exquisitez de este plato formado por capas de pasta y relleno de carnes, pollo, pescados o vegetales.
Aunque hoy es fácil encontrarla en su versión precocinada en cualquier supermercado, resulta más placentero disfrutar de este platillo hecho en casa, ya sea en su versión más clásica, con ingredientes de los más humildes o aprovechando las sobras.
Por ello, te presentamos diversas recetas para que intentes hacerla tu mismo y descubras por qué la convirtieron en Patrimonio de la Humanidad:
Lasaña de carne, según la receta tradicional
Si es tu primera vez haciendo lasaña, te proponemos esta receta de la versión más clásica, fácil y sacada de La cuchara de plata (Phaidon), uno de los libros de referencia para conocer a fondo la gastronomía italiana. Sin embargo, recuerda que la lasaña es un plato que se presta a muchas variantes y una vez dominada la técnica ya serás capaz de adaptarla a tus gustos.
Lasaña de salmón y verduras
Esta receta es una versión un poco más sofisticada, perfecta para alguna ocasión especial donde quieras sorprender a tus invitados. Lo bueno es que puedes cambiar las verduras a tu gusto, dependiendo de la temporalidad. En este caso se utiliza salsa bechamel, pimientos, calabacín, zanahoria y cebolla.
Lasaña con foie
Lo bueno de intentar preparar este platillo es que actualmente puedes comprar las placas de lasaña precocidas, de esta forma no será necesario hervirlas previamente, con lo que acortarás el tiempo de preparación de la receta y lograrás que resulte mucho más sencilla de elaborar. Para esta receta, si prefieres, en lugar de utilizar tomate confitado, puedes repartir por encima un poco de sofrito de tomate.
Lasaña boloñesa en el microondas
Esta propuesta es la más sencilla, rápida y deliciosa. Podrás prepararla en apenas 20 minutos, pero, sí, hay truco. Para esta receta se utiliza carne picada ya cocinada previamente con salsa de tomate y descongelada para la ocasión. Pero si no cuentas con ella, la elaboración te llevará 15 minutos más, por lo demás te sorprenderá lo fácil que es elaborar tu propia lasaña.
Lasaña de patatas
Esta es una versión muy distinta. No lleva pasta; por lo tanto, también es apta para personas que deben llevar una dieta sin gluten. Es fantástico como plato único para una comida familiar, además es muy fácil de preparar. Te proponemos la receta más clásica, con carne, pero también puedes prepararla con pisto, jamón y queso, entre otros, así como elaborar varias capas o dejar las patatas en rodajas en lugar de hacerlas puré.
Mini lasaña fría de mozzarella y pesto
Esta receta se parece más a una ensalada de pasta que a una lasaña tradicional, sin embargo, puede ser una versión ideal para los días calurosos o con poco tiempo para cocinar. El pesto lo puedes preparar en casa, quedará mucho más rico y conseguirás una textura más gruesa, que será mucho más adecuada para esta elaboración.
Lasaña de berenjenas vegetariana
Original y muy divertida de elaborar. En una fuente de vidrio, deberás extender una primera capa de salsa de tomate. Luego alternar las berenjenas, la salsa de tomate, la mozzarella y la pasta. Por último, añadir entre las capas hojas de albahaca y una cucharada de grana padano. Si lo deseas, también un chorrito de aceite crudo. ¡Listo!