El VIH debe tratarse desde el primer momento tras el diagnóstico, dice la OMS
Las indicaciones se basan en resultados de estudios recientes como START, que demuestran los beneficios de un tratamiento temprano para la salud del enfermo
La nueva guía, afirma la Organización, ayudará a evitar 21 millones de muertes por la enfermedad y unos 20 millones de nuevas infecciones en 2030
La organización también aconseja el tratamiento profiláctico preventivo para aquellas personas con riesgo elevado de infectarse
Después de que este verano durante la reunión anual de la Sociedad Internacional del SIDA se presentaran los resultados del estudio START, que concluía que tratar de forma temprana con antirretrovirales beneficiaba la salud del enfermo y disminuía el riesgo de transmisión del virus, ahora la Organización Mundial de la Salud (OMS) acaba de emitir una recomendación que cambiará definitivamente las estrategias de tratamiento de la enfermedad.
Este organismo aconseja que todas las personas infectadas con VIH empiecen a ser tratadas con antirretrovirales desde el momento en que son diagnosticadas, según ha anunciado a través de un comunicado. Eso hará que la cifra de individuos tratados pase de los 28 millones actuales a 37 millones, que es la cantidad de gente que se calcula que hay hoy en día con el virus.
Además, la OMS también recomienda que se facilite el acceso a tratamiento como medida preventiva –conocida como PrEP, profilaxis preexposición- a aquellas personas que tengan un riesgo elevado de contagio. En la guía de este organismo de 2014 ya recogía que era conveniente ofrecer una combinación de fármacos antirretrovirales para evitar la infección de individuos en situación de riesgo, aunque entonces sólo se refería a un colectivo, el de hombres que mantuvieran relaciones sexuales con otros hombres. Debido a la eficacia del PrEP y su alta aceptación, ahora la Organización amplía su recomendación a toda la población en riesgo.
"Es muy eficaz y se tiene que usar en personas que tienen una alta exposición al virus. Aunque tiene el riesgo de que si no se utiliza junto al preservativo, como está pasando ahora, favorece una alta prevalencia de enfermedades de transmisión sexual, como sífilis", valora a Big Vang el presidente de la Fundación Lucha contra el Sida, Bonaventura Clotet, director del Institut de Recerca de la Sida IrsiCaixa y jefe de la Unidad de VIH en el Hospital Germans Trias Pujol.
Esta nueva guía de recomendaciones se ha elaborado en colaboración con la agencia de Naciones Unidad para el sida, ONUSIDA. Su director, Michel Sibidé, valoraba en un comunicado de prensa de forma muy positiva este cambio de paradigma en el tratamiento del VIH: “Las nuevas guías son un paso muy importante hacia el objetivo de asegurar que todas las personas con VIH tienen acceso inmediato al tratamiento antirretroviral”.
Según esta agencia, el aplicar el tratamiento a todos aquellos individuos a quienes se les diagnostique la infección, sumado a la medida de proporcionar profilaxis preventiva a poblaciones en riesgo ayudará a evitar 21 millones de muertes por la enfermedad y unos 20 millones de nuevas infecciones en 2030.
"Estamos muy contentos con la decisión de la OMS porque el tratamiento consigue, si se toma bien, controlar la replicación del VIH en el 90% de los pacientes, con lo que se evita la transmisión del virus. La situación ideal, además, sería hacer pruebas de detección del VIH a todo aquel que se exponga a una situación de riesgo de contagio para poder diagnosticar y tratar de manera precoz", considera Clotet.
Este investigador experto en el VIH explica que si se comienza el tratamiento durante las cuatro primeras semanas después de la infección aguda, se consigue evitar la destrucción del sistema inmunitario asociado a los intestinos y "la cantidad de virus que queda escondida en el reservorio, que es lo que condiciona que el virus reaparezca,es muy baja. Estos pacientes probablemente serían los más idóneos para probar estrategias de erradicación, de cura, que estamos ahora trabajando en IrsiCaixa".
Por su parte, el director asociado de UNICEF, Craug McClure afirmaba que “el mundo no puede acabar con la epidemia de sida si nos dejamos a los niños y adolescentes detrás. Aplaudimos las nuevas recomendaciones de la OMS para ofrecer tratamiento a todas las personas, sea cual sea su edad, inmediatamente tras recibir diagnóstico”.
Esta nueva guía de la OMS forman parte de los objetivos establecidos por este organismo para 2020 que persiguen lograr erradicar la epidemia de VIH en 2030. Entre estos objetivos está que el 90% de la gente con VIH sea diagnosticada; que el 90% reciban tratamiento antirretroviral; y que el 90% de quienes estén en tratamiento no tengan virus detectables en sangre.
Cambio de paradigma
Esta decisión de la OMS se basa en las conclusiones a que han llegado varios estudios recientes, entre ellos START, que han demostrado que tratar desde el minuto uno a la población previene el desarrollo de complicaciones graves de salud, como tuberculosis o cáncer, e incluso la muerte del paciente. Hasta ahora, no se comenzaba a tratar a las personas infectadas con VIH hasta que no se detectaba una bajada en sus niveles de defensas. Y se hacía así porque muchos enfermos podían no presentar síntomas durante mucho tiempo y tener un sistema inmunitario preservado, mientras que los tratamientos tenían cierta toxicidad que podía mermar su calidad de vida.
No obstante, los últimos estudios han demostrado que una aplicación temprana del tratamiento mantiene al enfermo con mejor salud durante más tiempo y, además, reduce el riesgo de transmitir la enfermedad a la pareja.