La cápsula Orión de la misión Artemis 1 se precipitará hoy en la atmósfera a 40.000 kilómetros por hora y se calentará a 2.800 grados centígrados por la fricción del aire antes de amerizar en el océano Pacífico frente a la costa de Baja California a las 18.40, hora peninsular española. Será el punto final de la misión Artemis 1, en que la cápsula ha viajado sin tripulación a la órbita lunar y en que se han ensayado tecnologías necesarias para que puedan volver astronautas a la Luna a mediados de esta década.
La misión se inició el 16 de noviembre con el lanzamiento del nuevo cohete SLS, que demostró en su primer despegue que puede enviar astronautas de manera segura al espacio. Ahora falta demostrar que la cápsula Orión los puede traer de regreso a la Tierra también de manera segura.
El calendario del programa de exploración lunar depende de qué ocurra hoy en los minutos finales de la misión
El escudo térmico de Orión “es una parte crítica del equipo; está diseñado para proteger la nave y a los pasajeros que van a bordo”, recordó el jueves en rueda de prensa Mike Sarafin, director de la misión Artemis 1. Pero “tiene un diseño completamente nuevo” y “no hay ninguna instalación en el mundo donde podamos probarlo” simulando las condiciones extremas de la reentrada en la atmósfera.
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![La nave no tripulada Orión ha sobrevolado la superficie lunar a 130 kilómetros de altitud y ha encendido su motor durante dos minutos y medio para corregir su trayectoria y poder situarse en órbita alrededor del satélite. El objetivo de la misión es ensayar las tecnologías necesarias para que puedan viajar astronautas a la órbita de la Luna en 2024 y a su superficie a partir de 2025.
Orión “entró en la esfera de influencia lunar” el domingo a las 20.09 (hora peninsular española, como todas las que se indican en este artículo), ha informado la NASA en el blog de la misión. Esto significa que “la Luna, en lugar de la Tierra, [es] la principal fuerza gravitatoria que actúa sobre la nave”. En ese momento, cuatro días y medio después del despegue desde el Centro Espacial Kennedy, Orión había recorrido el 85% de la distancia de la Tierra a la Luna y navegaba a unos 600 kilómetros por hora.
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De ahí que la única manera de comprobar las prestaciones del escudo sea probándolo en una misión real. El objetivo número 1 de la misión actual, según anunció la NASA antes del lanzamiento, es precisamente probar el escudo térmico de Orión. El calendario del programa Artemis de exploración lunar dependerá de qué ocurra hoy en los minutos finales de la misión.
El interior de la cápsula Orión
Además del escudo térmico, también deben funcionar los paracaídas que frenarán la cápsula en la última parte del descenso. Entrarán en acción cuando la fricción del aire ya haya reducido la velocidad de los 40.000 kilómetros por hora iniciales a unos 500 km/h. A 7.600 metros de altitud, se abrirán dos grandes paracaídas de frenado que, en apenas un minuto, reducirán la velocidad a 160 km/h. Después, a unos 2.000 metros de altitud, se abrirán los tres paracaídas principales, de 35 metros de diámetro cada uno, encargados de guiar Orión a un amerizaje suave a no más de 30 km/h en el océano Pacífico.
Los paracaídas, a diferencia del escudo térmico, sí se han podido probar en condiciones similares, aunque no iguales, a las del descenso. “Los paracaídas son uno de los principales motivos de riesgo para la misión”, reconoció Sarafin el jueves. Después de haber realizado 47 tests, “este riesgo está bien evaluado, aunque queda algún riesgo residual”.
El regreso de Orión a la Tierra coincide con el 50 aniversario de la llegada de los últimos astronautas a la Luna
Otra novedad en el regreso de la cápsula Orión a la Tierra es la trayectoria de reentrada en la atmósfera. En lugar de realizar un descenso balístico directo como en las misiones a la Luna del programa Apolo, ahora se ha optado por hacer rebotar la cápsula en las capas altas de la atmósfera de manera similar a cómo se hace rebotar una piedra sobre la superficie de un lago. Con esto se consigue reducir las fuerzas G que experimentarán los astronautas en el interior de la cápsula -que no superarán los 4G- y controlar con más precisión el punto en que amerizará la cápsula.
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El punto de amerizaje se decidió el miércoles después de evaluar la previsión meteorológica frente a la costa de California para el domingo. Los responsables de la misión renunciaron al plan inicial de amerizar frente a San Diego, donde se esperan lluvia, vientos y fuerte oleaje, y optaron por enviar la cápsula 550 kilómetros más al sur.
Lanzamiento del cohete SLS desde el Centro Espacial Kennedy el 16 de noviembre
Allí, el buque USS Portland de la Marina de Estados Unidos irá a recuperarla. Se esperará unas dos horas a subirla a bordo para poder evaluar primero cómo Orión ha soportado el calor de la reentrada en la atmósfera y qué temperatura se ha alcanzado en su interior. Después la cápsula se llevará a la base naval de San Diego. Desde allí se enviará al Centro Espacial Kennedy de la NASA en Florida, donde se examinará en detalle su estado a lo largo de las próximas semanas.
El regreso de Orión a la Tierra coincide con el 50 aniversario de la llegada de los últimos astronautas a la Luna, que alunizaron el 11 de diciembre de 1972 en la misión Apolo 17.
Hasta ahora se han cumplido con creces todos los objetivos de la misión, informó Sarafin el jueves. Si hoy todo sale bien en el regreso de Orión a la Tierra, la NASA prevé enviar la misión Artemis 2 a la Luna en 2024, ya con astronautas que se situarán en órbita alrededor del satélite. La primera misión tripulada a la superficie lunar, Artemis 3, está prevista en este momento para 2025 o 2026.