Amancio Ortega sería el gran inversor de la nueva fiberco de Telefónica y Vodafone

Infinidad de EREs después, con una destrucción de puestos de trabajo imparable y tras confirmarse la fusión entre Orange y MásMóvil, que han creado la mayor operadora de España, los focos se han ido ya a buscar ese acuerdo entre Vodafone y Telefónica que pretende, gracias a la creación de una Fiberco, aprovechar mejor las sinergias y ofrecer más valor al usuario conteniendo los costes al compartir redes de fibra entre ambas operadoras.

En todo caso, quizás el mayor vuelco al sector teleco no lo traiga la competencia entre Vodafone, Movistar y MásOrange, sino la posible entrada de un gran inversor, uno muy grande, en la fiberco que preparan las operadoras roja y azul, y que nos anticipaban recientemente los compañeros de Expansión y Business Insider.

Hablamos cómo no de Amancio Ortega, el magnate y fundador que está detrás del imperio Inditex y que ahora, a través de su brazo inversor Pontegadea, continúa haciendo inversiones y accediendo a mercados estratégicos o a compañías punteras en múltiples sectores.

Pontegadea no quiere controlar la compañía, sino ofrecer soporte y músculo en un mercado crucial

Comenzó siendo una patrimonial centrada en el ladrillo aunque hace tiempo que Pontegadea es mucho más que eso. No en vano, el holding que controla las inversiones de Amancio Ortega a título personal está analizando y accediendo al accionariado de múltiples empresas en sectores estratégicos, centrándose ahora más que nada en energía y telecomunicaciones.

Su próximo movimiento, de hecho, va en esta línea, pues parece que la idea de Pontegadea es presentarse como un accionista minoritario pero potente en el consejo de la nueva empresa fiberco de Telefónica y Vodafone, en la que compraría entre un 27% y un 39% de las acciones valoradas en unos 2.000 millones de euros en su lanzamiento.

No será su primera gran adquisición en el sector, puesto que Amancio Ortega y Pontegadea ya han invertido en los últimos tiempos en Telxius, precisamente acompañando a Telefónica.

La llegada de un inversor tan importante como Amancio Ortega a una compañía operada por Telefónica y Vodafone puede suponer al fin ese espaldarazo y ese músculo financiero para devolver la confianza y las inversiones a un sector devaluado como el de las 'telecos'.

En esta nueva operación que Barclays y BBVA ya están estudiando, Pontegadea compraría un 27% de la participación que Vodafone tiene en la empresa (37%), quedándose Telefónica con un 63% del accionariado y manteniendo siempre el control. Algunas fuentes mencionan que Telefónica podría vender una parte para quedarse un 51% y asegurar precisamente este control, aunque haciendo líquida parte de la inversión.

Zegona, nueva propietaria de Vodafone, utilizaría estos ingresos para cuadrar cuentas y reducir la deuda con la que se financió precisamente la adquisición de la operadora de origen británico.

Todo esto es aún un embrión, aunque la entrada de un inversor tan importante en una compañía operada por Telefónica y Vodafone sí podría suponer un vuelco y un espaldarazo para mejorar un sector que ha caído en espiral negativa desde hace años, como decíamos devaluándose sin fin entre fusiones, adquisiciones, EREs y demás. Por supuesto, la nueva fiberco no sólo ofrecería su red a Telefónica y Vodafone, sino también a otros operadores que podrán comprar acceso a la red mediante acuerdos mayoristas.

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