Motorola Moto E, análisis del mejor gama baja Android del momento
El Motorola Moto E ha pasado por nuestras manos. Durante más de una semana he usado y exprimido al máximo el último modelo que la firma americana Motorola lanzaba al mercado . Hace algunos meses, el Motorola Moto G hacía estragos entre los usuarios que demandaban terminales con Android en su última versión, puro y con un precio muy asequible. Y el éxito ha sido rotundo.
La compañía quiso ir un paso más allá, y tras conseguir hacerse con el control de la gama media en Android, la gama baja o de entrada era su siguiente objetivo. El nuevo Moto E ha llegado con pretensiones de hacerse hueco en el bolsillo de cualquier nuevo usuario de Android, ser un regalo ideal para los más pequeños o para los más mayores y, sobre todo, un alivio para nuestras carteras.
Motorola Moto E | |
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Dimensiones | 124,8 x 64,8 x 12,3 mm (6,2 mm en las esquinas) |
Peso | 142 gramos |
Pantalla | 4,3" con resolución qHD (960 x 540 píxeles) |
Densidad de píxeles | 256 ppp |
Procesador | Qualcomm Snapdragon 200 1,2 GHz dual-core A7 |
GPU | Adreno 302 400 MHz single-core |
RAM | 1 GB |
Sistema operativo | Android 4.4 KitKat |
Almacenamiento | 4 GB + microSD (hasta 32 GB) |
Cámaras | Trasera de 5 megapíxeles |
Batería | 1980 mAh |
Fecha de salida | Por confirmar |
Precio de salida | 119 euros |
Sus especificaciones parece hablan por sí solas. Sin embargo, antes de que valoréis el terminal por la tabla superior, dejarme profundizar en cada uno de sus principales apartados como puede ser el rendimiento, el sistema operativo, su diseño o el aspecto multimedia. Os aseguro que os sorprenderá.
Diseño y dimensiones
El nuevo Moto E es, desde el primer momento en que nos hacemos con él, un terminal sumamente compacto. Aunque contenga una pantalla del mismo tamaño que el Samsung Galaxy S2, éste último es notablemente más alto, valorando así el buen trabajo de Motorola en reducir sus dimensiones.
Los márgenes laterales están muy logrados, al igual que el margen superior. Sin embargo es en su parte inferior donde nos encontramos el primer punto "negativo" del terminal. No se trata de algo importante en la experiencia final, pero estéticamente me hubiera gustado prescindir del espacio vació con el que cuenta entre el final de la pantalla y el altavoz de mayor tamaño.
Su parte trasera pasa por el mismo material y textura que sus hermanos Moto G y Moto X, muy suave al tacto a la par que minimalista y atractiva. El espacio dedicado para la cámara puede presentar un problema, en tanto en cuanto se crea un pequeño hueco entre la carcasa trasera y la lente donde el polvo y toda clase de suciedad puede verse alojada con frecuencia.
Pantalla
Al hablar de gama baja de terminales solemos imaginar dispositivos con 4 o menos pulgadas. Sin embargo Motorola ha querido dotar a su último smartphone de una pantalla de 4,3 pulgadas con una resolución qHD. A excepción del terminal de gama alta Sony Xperia Z1 Compact, hemos visto pocos terminales con esta resolución, que se ubican por encima de terminales como el mencionado Galaxy S2 u otros rivales directos como los dispositivos de bq.
No voy a engañar a nadie, pese a sus correctos 256 ppp, la pantalla del Moto E no es de lejos la mejor pantalla en un terminal de medianas dimensiones. El nivel de detalle sin embargo es bastante bueno, aunque los colores se antojan demasiado pálidos y poco saturados en algunos momentos.
En cuanto a la resolución de texto tanto en web como en aplicaciones de la talla de Pocket, Twitter o Feedly, la pantalla deja que desear si pensamos en estar continuamente leyendo sobre ella. Después de los primeros 20-30 minutos de lectura sin descanso, la experiencia puede empezar a ser molesta. En este sentido, el terminal se ubica a la par que otros terminales del mismo tamaño, aunque con un plus en cuanto a la vista de iconos, vídeos e imágenes.
Los ángulos de visión son buenos así como los niveles de brillo de los que dispone el terminal, si bien es cierto que hacer uso del modo automático puede resultar escaso en según qué situaciones.
Cámara y altavoces
Si hablamos del apartado fotográfico del terminal, la aplicación "Cámara" que llega instalada en el dispositivo de Motorola es bastante sencilla y algo descafeinada, aunque la velocidad de carga de la misma es estupenda. El primer aspecto negativo importante llega con el enfoque de las capturas de la única cámara, en su parte trasera. Y es que directamente no parece existir tal enfoque, ni tan siquiere en el modo selectivo. Esto es bastante molesto ya que el realizar fotografías de planos más o menos cercanos resultará algo muy complicado, no tanto si el objeto de nuestra captura está un tanto más alejado de la lente.
La ausencia de flash, algo entendible quizás en este nicho de mercado, es también digno de mencionar ya que las imágenes en bajas condiciones lumínicas no son precisamente el punto fuerte de ningún terminal del mercado. Además, aquellos que estuvieráis pensando en hacer uso de la cámara de Google, os puedo adelantar que este dispositivo no es compatible por el momento.
Bateria
Un apartado donde no esperaba muchas sorpresas. La duración de la bateria ha sido y sigue siendo un aspecto algo descuidado por los fabricantes, aunque con la nueva hornada de terminales estrella recién presentados como el HTC One (M8) o Sony Xperia Z2, parece que el asunto va mejorado.
Con un uso intendo de redes sociales, Whatsapp, algunas partidas a videojuegos en nuestros tránsitos diarios, algún que otro vídeo desde Youtube y navegación web, el terminal puede aguantarnos la jornada completa con 2 horas y media o 3 de uso de pantalla, aunque esto puede variar su vuestra cobertura o la conexión de datos no es muy estable y hace trabajar al terminal.
Un apartado en el que, bajo la experiencia que he podido tener, el Motorola Moto E cumple con un buen aprobado, siendo "suficiente" para la media de usuarios de Android.
Software
Android 4.4.2 KitKat sin una capa de personalización aparente. Tras hablar con la gente de Motorola en el evento de presentación, todos los discursos coincidían en destacar que han decidido dejar Android practicamente tal cual viene en su código fuente. Principalmente, para conseguir períodos de actualización muchos más cortos que otros fabricantes, algo que han demostrado holgadamente tanto con el Motorola Moto G y el Moto X.
Contaremos con immersive mode, transparencias en la barra de estado y de navegación, así como algunas aplicaciones propias de Motorola enfocadas a solventar las principales dudas o problemas iniciales con sus teléfonos. Además Motorla añade un par de aplicaciones que ser de utilidad para aquellos que lleguen desde otro Android, con la posibilidad de migrar nuestros datos de uno a otro terminal, así como otra aplicación "Ayuda" para solventar las principales dudas del usuario.
Rendimiento
Llegamos al meollo de la cuestión, el verdadero potencial de este terminal. Motorola ha hecho un gran trabajo de optimización de los recursos de hardware y software, lo que provoca una experiencia final notable. Correcta fluidez en todo momento en la interfaz, rápida apertura y carga de las aplicaciones y una muy buena gestión de la multirarea.
Una de las aplicaciones que consumen más recursos en terminales de gama baja es el navegador Google Chrome, dando lugar a experiencias en la web pésimas. Ha sido una grata sorpresa poder navegar por multitud de webs sin ningún problema o retraso de carga, con muy buenos scrolls dentro de ellas y correctos gestos pinch-to-zoom. Facebook, Evernote, Feedly, Youtube o Play Kiosco no suponen ningún obstáculo para el modesto Qualcomm Snapdragon 200. Si bien es cierto que en algunos momentos se echa en falta algo más de RAM a la hora de poder abrir rápidamente aplicaciones que hemos dejado de usar hace pocos minutos.
Destacado también la escasa capacidad de almacenamiento del terminal, 4GB, que podremos ampliar mediante tarjetas microSD, algo que no será todo lo útil que debiera ya que muchas aplicaciones no pueden ser instaladas en esta memoria extra.
Además, el terminal mueve sin miedo videojuegos como Angy Birds, Badland, Into the Dead, 300 Game o Edge of Tomorrow, aunque ni mucho menos al nivel de terminales con gráficas superiores, aunque no me he encontrado con un lag o retraso insufrible en los títulos arriba mencionados.
¿El mejor smartphone de la gama baja?
La pregunta que a todos nos mueve cuando pensamos en este nuevo Moto E. ¿Realmente vale la pena un terminal por este precio tan asequible? Sin duda.Es, a día de hoy, uno de los terminales con mejor relación calidad precio, al igual que otros modelos como su hermano Moto G, el chino OnePlus One así como el último teléfono de Google, Nexus 5.
Claro que las diferencias entre estos y el Moto E son grandes, enormes, pero si hablamos de la gama baja por debajo de los 120 euros, este terminal no tiene rival alguno. Y es que la experiencia tan fluida y suave navegando por su interfaz, sus aplicaciones y por la web, es algo que pocos terminales han conseguido con la cantidad de recursos que cuenta el dispositivo.
¿Vale su precio teniendo en cuenta la presencia del Moto G? Difícil respuesta. Si bien es cierto que a día de hoy son sólo 50-60 euros de diferencia entre uno y otro, es más que probable que el modelo Moto E pueda plantarse por unos 100 euros, será entonces cuando el tamaño de pantalla y su resolución serán los principales aspectos a tener en cuenta a la hora de adquirir uno u otro terminal.
En este acotado presupuesto son muchos los sacrificios a realizar: cámara, tamaño de pantalla, potencia de su hardware, étcetera, sin embargo es un estupendo e idóneo producto para aquellos que quieran contar con un dispositivo muy barato, con Android en su última versión, actualizaciones rápidas y aseguradas, con una fluidez envidiada por muchos otros smartphone con precios superiores. En definitiva, el rey de la gama baja, el regalo perfecto para los presupuestos mas ajustados y un primer compañero para los nuevos usuarios de Android.
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